San Cristóbal. El ex presidente de la República Hipólito Mejía estaba  en sus aguas.  Exponía con su estilo peculiar  a amigos y reporteros los frutos que ya está cosechando en 200 tareas de tierra, los cuales desarrolla en su finca “Mangos Rancho Palmacea”, ubicada en Canasta, San Cristóbal.

Acompañado del empresario Rafael Perelló, el ex mandatario hizo degustar a los presentes de una gran variedad de mangos que produce, para fines de exportación en un futuro. Los chistes les saltaban a cada momento, muchos de ellos dejaban estupefactos a los invitados.

 Doña Rosa, su esposa de 44  años, acostumbrada a la forma de ser de Mejía sólo escuchaba todo cuanto decía quien gobernó el país durante el período 2000-2004.

Cuando el pasado mandatario invitó a los presentes para que   probaran  el sabor de los distintos tipos de  mangos, que estaban en igual número de recipientes, recomendó a no comerlos en “abundancia” en ese momento.

Exhibía en una larga mesa mangos de diferentes tamaño, forma y color. Mejía como conocedor y experimentado en la materia advierte que lo importante del mango para el mercado exportador es que tenga buen olor y  sabor.

Del mango banilejo, dijo,  hay que hacer un trabajo genético para que pueda permanecer en el mercado, ya que en la actualidad se deteriora.

 Una riqueza.  Mejía, quien es agrónomo,   ha introducido frutas tropicales en el país. Explica que las variedades del mango de la India resisten un mes luego de su cosecha, lo que es ventaja para la entrada en el mercado local y exportador. Aclara que su finca produce 130 variedades de mangos que ha traído de otros países y que ya ha probado en el terreno de este país.

 Con la primera producción, dice, sabrá cuál variedad le gustará a la gente. Con ese dato desarrollará con mayor intensidad el tipo o los tipos de mangos.

Además, manifestó que  tiene 100 variedad de aguacate, así como las frutas tropicales como granada, mamón, pitahaya, anón, tamarindo dulce, naranjas tipo  pomelo, entre otras. De la Pitahaya dijo es de origen chino, es rica y  anti cacería. De ese fruto, que es como un cactus, tiene 13 variedades. Se produce en tierras secas.

  Sostiene que esas variedades son las  que quieren los americanos, europeos y asiáticos.

Banco de semilla

  Mejía  dijo que con ese proyecto se  tendrá un banco de semilla para ser facilitado  a pequeños agricultores, a los fines  que puedan  desarrollar sus proyectos.

Se mostró convencido  que será halagüeño la producción de esos frutos e informó que en una finca de la zona de Cambita hay 100 mil tareas de aguacate.

  El dirigente perredeísta sostuvo que en Baní habrá un gran auge  y  crecimiento del mercado para la exportación, para el procesamiento y para el consumo interno.  En esa finca hay varios agricultores dedicados a la labor de desarrollo de ese gran proyecto.

 “Esto lo hemos traído más bien a nivel personal, artesanal, tanto Rafael Perelló como yo y otros amigos lo hemos venido multiplicando en los últimos cinco años”.