Asociaciones de vecinos, comerciantes y dueños de clínicas de la avenida Independencia reclamaron ayer al Ayuntamiento del Distrito Nacional que saque de esa vía la circulación de vehículos pesados (camiones y patanas), lo que afecta la salud y la tranquilidad de quienes viven en la zona.

Huberto Henríquez, presidente de la junta de vecinos; Víctor Manuel Berrido, director de la Clínica del Dolor, y Maritza Calderón, residente en la zona, expresaron que están preocupados por la contaminación tanto de ruidos como de dióxido de carbono a que están expuestos los que trabajan y viven en la avenida Independencia.

Insistieron en que constituye una violación del Ayuntamiento del Distrito que tras la prohibición del paso por la vía y la desviación hacia la George Washington, se revirtiera la medida. En la actualidad, los vehículos pesados que deberían circular por la George Washington transitan por la Independencia completa. Esto constituye una bomba de tiempo.