Manuel Espinosa Rosario 
COMENDADOR, ElÍas Piña. A diferencia de lo que ocurre normalmente, las calles de este municipio estuvieron desiertas ayer, debido a que las autoridades haitianas impidieron que sus compatriotas cruzaran la línea fronteriza para participar en el tradicional mercado binacional que se celebra lunes y viernes.
Solo se observaban algunos haitianos que tienen casas rentadas para guardar las mercancías que no son vendidas.
En tanto, toda el área de Carrizal y las calles aledañas al mercado local eran vigiladas por militares del Cuerpo de Seguridad Fronteriza (Cesfront) y de la Tercera Brigada con asiento en San Juan de la Maguana.
Las autoridades del vecino país reaccionaron de esa manera debido al enfrentamiento entre civiles haitianos y militares del Cesfront, que dejó un saldo de seis heridos, cinco de ellos haitianos y un militar dominicano.
El hecho ocurrido el sábado, se originó porque los militares dominicanos impidieron el paso hacia Haití de varias patanas cargadas de cemento que no tenían documentación aduanal.
En tiempo normal, desde las 5:00 de la mañana de cada lunes y viernes cientos de haitianos ingresan por Carrizal a esta ciudad, a comprar y vender una diversidad de artículos de uso y consumo.
Los comerciantes haitianos comienzan a llegar a esta ciudad a partir de las 8:00 de la mañana, hora a la que los militares del Cesfront abren los dos portones de hierro instalados en Carrizal.
El comandante de la Tercera Brigada del Ejército de la República Dominicana (ERD), coronel Wilson Castillo González, informó que envió a esta ciudad un contingente de 50 efectivos, así como un equipo élite, “por cualquier eventualidad”.
