ANTONIO MARTÍNEZ ROJAS
Del 14 al 18 del mes que discurre, se reunieron en la Organización Internacional del Cacao (ICCO), en la ciudad de Londres, el Consejo, Comité Ejecutivo y los Órganos Auxiliares, y el 19 el panel Ad hoc de expertos para conocer los casos de República Dominicana, Ecuador, Papua Nueva Guinea y Trinidad y Tobago, en ese orden.

El primer gran triunfo de la delegación dominicana que asistió a estos encuentros fue la selección del país en el Consejo como uno de los cinco países productores (Costa de Marfil, Ghana, Malasia, Ecuador y República Dominicana), para discutir frente a la selección de los países consumidores encabezados por la Unión Europea, sea la prórroga o modificación del Convenio Internacional del Cacao, 2001, o la redacción de un nuevo acuerdo, ya que el actual vence en octubre de 2008.

El haber sido seleccionado nuestro país para conformar este grupo de discusión no fue un hecho fortuito, sino el reconocimiento de toda una activa participación en las reuniones, tanto ordinarias como extraordinarias, y haber tenido una destacada actuación cuando se llevaron a cabo las dos reuniones en Ginebra, que hicieron posible la conclusión del Convenio de 2001, con los auspicios de la ONU, único que hasta la fecha ha logrado la confirmación, gracias al porcentaje aportado por nuestro país con su ratificación por el Congreso.

Sin embargo, el triunfo más rotundo lo obtuvimos cuando en la reunión del panel Ad hoc que conocía nuestra solicitud de ser incluidos en el Anexo C del Convenio 2001 como productores y exportadores parciales de cacao fino o de aroma, nos reconoció un 40%. Este panel fue presidido por Edward S. Seguine, vicepresidente de Guittard Chocolate Co., y compuesto por quince duchos negociadores, alguno de los cuales compra nuestro cacao tipo Hispaniola. El debate se prolongó por unos cuarenta y cinco minutos y pensamos que podríamos lograr entre un 50 y 60%, más una desafortunada intervención del representante del CIRAD de Francia hizo que los jueces se inclinaran entre un 40 y 50% para aprobar finalmente el 40%.

La delegación dominicana cifraba sus esperanzas en un 50%, basándose en que los embarques de cacao tipo Hispaniola, tanto orgánico como convencional, se situaban hasta la fecha en un 52%. Debemos destacar la excelente defensa de nuestro cacao que hizo la experta Pamela Thornton, representante de la Asociación de Comerciantes de Cacao de América, mejor conocida por sus siglas inglesas CMMA, quien se volcó en elogios y ponderó los esfuerzos de los productores dominicanos por insertarse en la modernidad.

En nuestras entregas, hemos tratado las mismas con honestidad y la mayor objetividad posible. En consecuencia, debemos empezar por señalar que este triunfo se debe a la perseverancia y a la profesionalidad de los principales actores de la cadena y a los cuales queremos rendirles nuestro respeto y gratitud. En primer lugar, a Don Antonio Guzmán Fernández, quien aconsejado por su Secretario de Estado de Agricultura, Hipólito Mejía, respaldó la labor del Dr. Allison y su equipo de investigación. Además, creó el Departamento de Cacao de la SEA y la Comisión de Cacao, en 1978. Al siguiente año, promulgó el Decreto que instituyó el cacao tipo Hispaniola, que al ser fermentado lo diferenciaba del hasta entonces nuestro único tipo: Sánchez. Ahora bien, sin el concurso de la Hershey Foods Corporation, que ese mismo año estableció una prima de diez centavos de dólar por libra, este proyecto que hoy logra esta resonante victoria, no hubiese sido posible. El mismo tuvo su despegue, cuando el secretario Mejía y la firma Mallano, aliada de Hershey en el proyecto, efectuaron el primer embarque de cacao tipo Hispaniola el día 5 de julio de 1980.

Héroes anónimos de esta batalla, en la cual reconocemos que posiblemente olvidemos involuntariamente algunos nombres: En Hershey, Glen Trout y B. K. Matlick, quienes asiduamente visitaron el país y nos invitaron en múltiples ocasiones a Hershey, Pennsylvania. En M &M Mars, Ron Bixley; en World Finest Chocolate, Ed Opler y en General Cocoa, Bill Sterns.

El señor Secretario de Agricultura, ingeniero Salvador (Chío) Jiménez para el combate final, seleccionó un equipo compuesto por el que estas líneas escribe como representante; el licenciado Idelfonso Medina, como representante suplente, licenciado Gaby Roig, suplente, ingeniero Gregorio García, suplente, y el agrónomo Diego Borbón, asesor. Una mención muy especial merece el asesor internacional, Freddy Amores.

Como colofón podemos agregar que esta recomendación del panel Ad hoc sobre el caso dominicano debe ser refrendada por el Consejo de la ICCO y este organismo, al tener la decisión final, puede mejorar el porcentaje asignado.