Elegantes, refinados y definitivamente exquisitos son los collares de larimar, joyas que ninguna mujer rechazaría, porque les da la oportunidad de exhibir una pieza hecha con una piedra semipreciosa exclusiva de República Dominicana.
El diseñador de joyas y accesorios se esmera en plasmar en el papel diseños que la mano artesanal convierte en piezas impresionantes y de un incalculable valor en el orden sentimental y monetario.
La creatividad fluye espontáneamente; luego de un estudio e investigación de la procedencia y características del larimar, una piedra que no se encuentra en ningún otro lugar del mundo.
Así lo afirma el artista Hilario Padilla, un hombre de fino gusto en la creación de collares que acompaña de aretes, pulseras y anillos, un cuarteto de joyas semipreciosas que distinguen a la mujer.
Para crear una pieza hay que estudiar, investigar y desarrollar el espíritu de la creatividad, sostiene Hilario, quien se inició en el trabajo de la joyería artesanal en 1976 de la mano de Miguel Méndez, descubridor de la milenaria piedra.
Durante tres años acumuló colecciones de piezas que ahora oferta en ferias artesanales, en la tienda Aida Perdomo, en Plaza La Lira 1 y en Plaza Jaragua, en ubicada en la avenida 27 de Febrero, entre las calles 30 de Marzo y Doctor Delgado.
Hilario Padilla crea piezas exclusivas montadas en aluminio tratado y otros materiales, debido, según afirma, al alza de precios que han experimentado el oro y la plata en el mercado internacional.
La frase
Hilario Padilla
Mis collares son colecciones creadas en semanas y meses y su belleza depende de la creatividad del momento.
Zoom
Orgullo de RD
El larimar gana cada día más espacio en el ámbito internacional por la rareza de la piedra y la belleza de sus colores que presenta sus características intrínsecas. Definitivamente, un orgullo de República Dominicana, único país donde se encuentra.
Hilario Padilla tiene en proyecto montar una tienda en Higüey y otra en un sector de la capital que no identificó.