RIO DE JANEIRO. Los congresistas de Brasil se disponen a aumentar sus propios salarios y los de los jueces de la Corte Suprema.

La iniciativa surge una semana después de que el presidente interino Michel Temer estimó que el déficit fiscal del país en 2016 será de unos 47.000 millones de dólares.

En semanas recientes, su gobierno ha dado señales de que habrá recortes en los gastos de atención médica, educación y asistencia social.

Brasil, el país de mayor población de Latinoamérica, está sufriendo su peor crisis económica desde la década de 1930. La Cámara de Diputados votó el jueves a favor de aumentar sus sueldos entre un 16% y 41%.

La iniciativa pasa ahora al Senado, donde se da por sentado que pasará.

La presidenta suspendida Dilma Rousseff, quien está siendo sometida a juicio político por el Senado, vetó una medida similar el año pasado.