La venezolana Yenny Pérez Canelón, de 27 años, ultimada supuestamente a manos del italiano Michael Sosa (o Saba) el pasado 21 de diciembre casi a las 5:00 de la mañana en un apartamento en Piantini, Distrito Nacional, es definida por su hermana Yeisy Pérez como una persona alegre, que «no le gustaba mucho la calle, sólo bebía un poco de vino y bailaba».
Su muerte ha consternado al país, mientras en las redes sociales se tejen versiones basadas en lo que la dama hacía dentro de la habitación con el extranjero, con quien duró aproximadamente unas cinco horas aquella fatídica madrugada, según el Ministerio Público.
Sin embargo, la hermana de la víctima, contó al periódico Hoy que ella y su pariente llegaron a la República Dominicana en el año 2017 y comenzaron a trabajan de camareras en un campo. ««Al pasar los años, ella (Yenny) puso una tienda de trajes de baño, no física, sino (para vender) por las redes sociales», contó.
Añadió que su hermana «fue metiendo ropa y puso (una tienda) física en Venezuela, y vendía en República Dominicana por redes y en Venezuela en físico».
La familiar de la occisa negó «todo lo que se dice en las redes» sobre el trabajo que hacía su hermana al momento de su muerte, y pidió que se haga justicia y el imputado pague por los hechos.
Sobre el motivo de la macabra muerte, que incluye desmembramiento, Yeisy dijo que «sólo Dios, ella (su hermana) y esa bestia (el italiano) saben».
Los procedimientos fúnebres serán en Venezuela, indicó. Mientras el presunto verdugo, por orden del juez de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional, Rigoberto Sena, cumple desde este miércoles una medida de coerción consistente en un año de prisión preventiva en el penal para hombres de Najayo, provincia San Cristóbal.
Según el Ministerio Público, el imputado le disparó en el corazón a Pérez Canelón con una pistola Glock, calibre 9 milímetros, con su cargador y un silenciador, y luego procedió a descuartizar el cuerpo de la joven, en un hecho ocurrido el pasado 21 de diciembre, en un apartamento del piso 11 de la torre Suites by Refa, de la calle Andrés Julio Aybar, del sector Piantini del Distrito Nacional.
Por el hecho, la Policía persigue a otras tres personas.