En Sabana Perdida buscan soluciones a la crisis de agua

En Sabana Perdida buscan soluciones a la crisis de agua

La escasez de agua potable en más de 60 sectores de la zona Sur de Sabana Perdida, en Santo Domingo Norte, empuja a sus residentes a buscar alternativas colectivas e individuales para abastecerse del líquido.

Como hace más de cinco de años que no reciben agua por las tuberías, moradores de los barrios Altagracia, Sabana Centro, Manuel Caraballo, Villa Blanca y Alto de los Cerros, entre otros, se han visto en la necesidad de juntarse por cuadras y calles para construir pozos con bombas sumergibles.

Por ejemplo, en apenas cinco cuadras en el barrio La Altagracia los vecinos han construido igual cantidad de pozos, en busca de la solución que las autoridades no han sido capaces de resolver, a pesar de las protestas y visitas hecha a los organismos responsables, tal como las oficinas de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (Caasd) y Ayuntamiento de Santo Domingo Norte.

Carlos Portorreal, presidente de la junta de vecinos La Unión, del sector Altagracia Primera, precisó que en los últimos meses han sido abierto pozos en calles como Las Marías, en la José Contreras, otro en La Altagracia y además de un quinto en la María Trinidad Sánchez.

El dirigente comunitario informó que para construir las soluciones de agua cada casa aporta entre dos y tres mil pesos, con  sacrificios, ya que la mayoría son familias de escasos recursos, que viven del chiripeo.

Expresó que el costo de un pozo oscila entre 70 y 90 mil pesos, pero que abaratan los costos por los vecinos que aportan además la mano de obra.

En cuanto al acueducto de Salinidad, que se construye desde hace varios  años, dice que es el cuento de nunca acabar: en cada campaña las autoridades ofrecen su terminación porque necesitan los votos pero, una vez concluyen las elecciones, jamás vuelven por los sectores afectados.

El ASDN.  El Ayuntamiento del municipio de Santo Domingo Norte tampoco cumple con sus tareas: las calles están en muy mal estado y a pesar de las exigencias de la comunidad esta institución no corresponde.

“Cuando llueve, mira el polvo, por aquí no hay quien camine debido al lodazal que se produce”, expresó Portorreal. A esto agrega la cantidad de mosquitos que se producen en las aguas estancadas. 

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