POR EDUARDO TEJERA
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Hace varios días en una presentación oficial por televisión y la prensa escrita, el Candidato por el PRD, el empresario Miguel Vargas, siguiendo los consejos de sus asesores económicos ofreció un plan económico de reducción de impuestos y aumento de gastos, tan contradictorio, como irrealista.

Es un plan puramente electoral, de demagogia a la vieja usanza, para las masas y los empresarios miopes, pues brindó un caramelo para cada sector, sin tener encuentra el real estado de la economía y las finanzas públicas, ni de los compromisos que tendrá que afrontar cualquier gobierno que surja del 2008-20012.

Prometió bajar el impuesto sobre la renta corporativo y personal del 25 % a un 15 %, una medida totalmente conservadora, sino de la derecha en la política europea y norteamericana. En nuestro país con tan alta evasión impositiva reducirle los impuestos a la clase corporativa y a las personas de medianos y altos ingresos, los ricos, es algo bastante divorciado con la realidad social del país. Es injusto, fomenta la inequidad y es un beneficio adicional para la clase media alta y los ricos. Ahí se observa la fusión entre Vargas con el neoliberalismo que le rodea. Los neoliberales dominicanos proponían eso en 1989 y también los de Estados Unidos. También se observa el extravío filosófico del PRD-PPH de derecha actual. En los Estados Unidos es la propuesta permanente en los últimos 20 años del ala derecha del Partido Republicano, que ni siquiera el presidente Bush se atreve a proponerlo formalmente como le pidieron varias veces en la Convención Republicana.

En España, Alemania, Francia, Inglaterra o Alemania, sería impensable que los socialdemócratas propongan tal medida regresiva. Allá el impuesto sobre la renta es en escala, a más altos ingresos las tasas son igualmente más altas, y llegan hasta el 48 % o más en algunos países para los ricos. En Canadá, un país social igualitario y avanzado, ni el Partido Conservador del Primer Ministro Harper se atrevería a tal propuesta, pues simplemente caería su gobierno de minoría en un soplón en el Parlamento. En Canadá el PM Harper un Conservador moderno con criterio social y su Ministro de Finanzas Faherty, propusieron cambios de leyes este año para introducir nuevos impuestos a los Fondos de Inversiones y otras áreas, que se convirtieron en una vía para evadir el impuesto corporativo y están detrás de aumentar las tasas de impuestos para los más pudientes, para evitar que la brecha entre la gran clase media y los ricos aumente. Es decir, propone lo inverso del Candidato Vargas. En Canadá son social demócratas de verdad hasta los Conservadores y el Partido Liberal es aún más progresista, no solo en años de elecciones.

Igualmente el Candidato Vargas del PRD empresarial propone aumentar el gasto social en educación, salud en aumentos de salarios y de paso incrementar las inversiones públicas en infraestructura. ¿Y cómo harán todo esto? ¿Es un plan muy ambicioso fiscalmente que con recursos internos jamás se cumpliría bajando los impuestos? Y con una carga fiscal de apenas un 17 % del PIB y cómo. Se olvidan que estamos pagando un gran por ciento de la deuda externa que el PRD-PPH dejó, que costará como RD$ 50,000 millones al Presupuesto Nacional del 2008, de la crisis bancaria que le costará al Gobierno como RD$ 6,000 anuales (el costo financiero de los Certificados del Banco Central), se olvidan que el precio del petróleo está a US$ 86 el barril y va directo a la meta de US$ 100 el barril como desea Venezuela y otros miembros de la OPEP, se olvidan del costo de implementación de la seguridad social para el estado, quizás más de RD$ 10,000 millones o hasta RD$ 20,000 millones según otros expertos, se olvidan del subsidio a la electricidad y gas propano — una política social inevitable y necesaria para el pueblo —, y se olvidan de la necesidad de un aumento salarial a todos los empleados públicos y privados del 10 % al 12 % mínimo para recuperar el salario real.

Cómo se pueden olvidar de estos compromisos o cómo podrán cumplir estas demagógicas promesas reduciendo los impuestos directos, que son los más liberales y socialmente justos.? ¿Creen en milagros o saben gobernar? ¿Y van a tratar de reducir los impuestos directos, antes de los indirectos más regresivos? O vamos hacia el rompimiento de la estabilidad macroeconómica, pieza básica en el relanzamiento económico dominicano y contratar más deuda externa con inflación, como ocurrió en el período 2000-2004? ¿En qué estamos?