Cuando uno va a ver una obra de teatro representada por actores de sobrada calidad, profesionalidad y experiencia, se hace la expectativa de que va a presencial un buen espectáculo de teatro. Así me ocurrió el vienes cuando fui a la sala Ravelo, junto al periodista Carlos T. Martínez, a ver a los veteranos actores María Castillo y Manuel Chapuseaux en la representación teatral “Banco de Parque”. Una pieza teatral cómica-dramática del ruso Alexander Gelman, trata acerca de un hombre y una mujer que se conocieron en un parque, se “amaron” por unas horas y volvieron a coincidir un año después en el mismo banco de parque. Ambos se desnudan emocionalmente aflorando sus almas. Concurrimos a una puesta en escena excepcional donde trasluce la veteranía de Chapuseaux que, al igual que María, ronda en los 40 años de experiencia. Ella, haciendo gala del dominio del método de Konstantin Stanislavski demostró que “nadie puede con ella”, reafirmando que es la “dama del teatro”. Ambos son dos maestros del arte escénico.