No escribiré de Odebrecht
No escribiré del virus “Odebrecht” que ha infectado medio mundo con su pus de corrupción, incluyendo organismos, políticos, congresistas y agentes lobistas.
No me interesa escribir que se estén peleando por quien controla la Liga Municipal Dominicana.
Tampoco escribiré de la banda, y no es de música, de Percival Matos y su estructura criminal.
Mucho menos voy a escribir de la foto del profesor de Utesa que se hizo “encuero en pelota”, ni de la “pela de lengua” que le dio Yelitza Lora a Roberto Angel Salcedo.
Mucho menos voy a perder mi tiempo escribiendo de la otra pela que le están dando al Licey (y yo soy liceísta). Tampoco quiero referirme al tema de que el Conservatorio Nacional de Música está vuelto un verdadero desastre.
Hoy, me da la gana de escribir sobre un muchacho, un cineasta, de nombre José María Cabral que, su más reciente película “Carpinteros”, se va a convertir en la primera obra dominicana en concursar el próximo jueves en el festival de cine Sudance.
“Carpinteros”, fue escogida entre 13 mil películas de 12 que van a competir. Es una buena noticia, no solo para Cabral, sino para la industria del cine dominicano.
Dentro de tantas noticias negativas que dominan el ambiente, llega esta de José María, deseándole que gane.
“Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán”. Marcos 11:24.