No tengo el privilegio de conocer a la presidente del Círculo de Locutores Dominicanos (CLD), la profesional del micrófono Ana Daisy Guerrero, pero a la luz de sus actuaciones esta mujer está realizando una formidable labor en esa entidad.
El CLD es una institución amparada en la ley número 122-05, que regula las asociaciones sin fines de lucro o las organizaciones no gubernamentales (ONG), y como tal debe manejarse con unos niveles de criterios diferentes.
No es lo mismo manejar una ONG como si fuera compañía de SRL (Sociedad de Responsabilidad Limitada), sociedad anónima o compañía por acciones.
El que dirige una asociación tiene que despojarse de todos los intereses personales y profesionales, poner los oídos en el corazón de su membresía y escuchar sus inquietudes y problemas, para plasmar la estrategia que satisfaga a la mayoría. Eso es todo.
Ana Daisy tiene la responsabilidad ante la sociedad y ante los miembros del círculo de hacer un trabajo digno, transparente, con valores y participativo, y eso es, a mi humilde opinión, lo que ella hasta ahora está demostrando: ¡una labor brillante!