Viendo a Nuria Piera un sábado de estos, donde pedía ayuda para un adolescente que tenía un tumor en la cabeza que, a consecuencia de ese tumor maligno, perdería la visión. Al siguiente sábado una noble familia, que no quiso identificarse para los televidentes, donó RD$600 mil, que daba para operarlo a él y a dos niños más.
Esta acción me retrotrae a dos grandes figuras de la televisión: Freddy Beras Goico y Rafael Corporán de los Santos.
No había un televidente pobre que necesitara recursos para comprar una receta, una cirugía de corazón y en cualquier parte del cuerpo, para comprar alimentos, que no recurriera a Freddy o Corporán. No eran poses de Tv sentían y vivían lo que hacían cuando una madre pedía ayuda para operar a su hijo.
Estos dos gigantes nos enseñaron, a todos los dominicanos, que la Tv además de informar, entretener y educar, es para socorrer a los más necesitados. La TV dominicana está acéfala de una figura pública que herede el legado de estos prohombres, y esa deber ser Nuria Piera.