En la memoria. Deudos llevan flores hoy al cementerio
Un ser querido que ha dejado el plano terrenal siempre es recordado por quienes le amaron, no obstante, cada 2 de noviembre se conmemora el día de los fieles difuntos, por lo que las personas suelen encender una vela y así simbolizan que mantienen vivo el recuerdo.
Además de encender una luz, muchos familiares y amigos llevan flores a las tumbas, así como alimentos a San Elías: El barón del Cementerio, primer muerto de los camposantos.
Con estas oraciones los deudos buscan compensar sus penas y reiterar su cariño hacia ese ser querido que ya se marchó de este mundo.
Origen
Desde el 2 de noviembre del año 998 cuando se creó un día especial para los difuntos, establecido por el monje benedictino San Odilón, de Francia. Su idea fue adoptada por Roma en el siglo XVI y de ahí se difundió a todas las demás naciones.
La tradición de rezar por los muertos se remonta a los primeros tiempos del cristianismo, en donde ya se honraba su recuerdo y se ofrecían oraciones y sacrificios por ellos, pues cuando una persona muere no es capaz de hacer nada para ganar el cielo; sin embargo, los vivos sí pueden ofrecer obras para que el difunto alcance la salvación.
A estas oraciones se les llama sufragios y se considera que la mejor es ofrecer la Santa Misa por los difuntos.
Las principales iglesias acordaron tener el mismo calendario y días de celebraciones religiosas para facilitar las asistencia a sus feligreses a sus respectivas celebraciones.