Apesar de que cada noviembre las ventas de los materiales ferretero se dinamizan al comenzar la época de Navidad, este año no ha habido ningún incremento significativo.
Un ejemplo que ilustra este rezago es la venta de pinturas, cuya demanda los dominicanos aumentan próximo a las navidades para remozar sus viviendas.
La causa de esa situación es la falta de circulante, que mantiene paralizada la actividad comercial, según los directivos de la Asociación y la Cooperativa de Ferreteros, quienes participaron en el encuentro económico de HOY.
El presidente de la Asociación, Idelfonso Vázquez, relacionó la falta de cirulante con la disminución de las remesas, que registran una caída de más de 20%.
Para este tiempo, la gente comenzaba ya a pintar sus casas, pero ahora el sector ferretero no ha detectado un aumento en la demanda del producto.
Pero manifestaron su esperanza de que luego que el Gobierno ponga a circular los US$900 millones que ingresarán tras el acuerdo con el Fondo Monetario se comenzará a percibir más flujo en el sector.
Esperamos que el dinero que entrará al país se invierta para que pueda sentirse en la economía. Entendemos que la inversión social debe ser el foco número uno del Gobierno, sugirió Vázquez.
El comerciante estuvo acompañado en el encuentro por Domingo Díaz, vicepresidente; Basilio Ruiz, director; Domingo Fermín, subdirector; Iván Morales, secretario general; Erubén Peña, secretario de actas; Luis Mejía, ex presidente, y Pablo Antigua, miembro de la entidad. Por la Cooperativa estuvo su presidente, Luis Emilio de los Santos.
Al igual que Váquez, Mejía considera que uno de los sectores que debe ser más favorecido con los recursos que recibirá el Gobierno es el de la construcción. Recordó que la construcción es uno de los sectores con mayor incidencia sobre la economía, por lo que debe ocupar el primer lugar en la inversión social.
En otro orden, Vázquez se quejó de que los suplidores mantengan el crédito restringido, situación que impide competir a los pequeños comercios, que no cuentan con grandes capitales.
Para poder competir, el crédito es fundamental. Cuando recibimos una mercancía al contado es a un precio y si es a crédito a 30 días es a otro precio, por lo que cuando tardan 60 días en pagarla se pierden todas las ganancias, y así no se puede competir, señaló
En tal sentido, sugirió que los suplidores mantengan el crédito a 30 y 60 días sin ninguna penalización.
Estabilidad del dólar
De Santos explicó además que los ferreteros que se están abriendo paso en las importaciones a través de la Cooperativa, se benefician con la estabilidad de la tasa del dólar, porque pueden adquirir los materiales al mismo precio y en una mejor condición.
En ese sentido, de los Santos y Mejía coincidieron al señalar que el sector importador de mercancías en el país está a la espera de que la presente gestión de la Dirección General de Aduanas, al igual que la pasada, les vuelva a dar facilidad de crédito a los importadores.
Explicaron que una iniciativa de esa naturaleza en estos momentos no sólo dinamizaría el sector ferretero, sino que esas facilidades serían transferidas a los consumidores.
Manifestaron que ante esa propuesta el director de Aduanas, Rafael Camilo, ha estado renuente a esa medida, por lo que lo instaron a reconsiderar su posición, de manera que el sector pueda contar con un alivio al igual que la población.
Recordaron que cuando el ciclón George azotó el país, en septiembre de 1998, Aduanas permitió importar sin desaduanizar desde Costa Rica, y tres meses después, cuando se estabilizaron los precios, los importadores efectuaron sus pagos.
Cautelosos ante créditos bancarios
A pesar de que en los últimos meses las tasas de interés de los bancos comerciales han bajado cosiderablemente, los ferreteros no se motivan a solicitar préstamos, por temor a que posteriormente sean aumentadas, en medio de una parálisis en sus ventas.
Idelfonso Vázquez, presidente del la Asociación de Ferreteros, sostuvo que en muchos casos los bancos les prestan a una tasa pero pasado un tiempo la aumentan.
El ferretero es muy cauteloso, porque para nosotros muchas veces esas tasas son onerosas, y nuestros negocios no las soportan. Entonces, para poder pagar hay que trabajar extra y ser más estricto en el gasto. Sostuvo que es muy fuerte para las pequeñas ferretería acudir a créditos bancarios cuando no hay una definición de una tasa fija, y sin que haya un flujo de caja que permita pagar sin ninguna demora.
Sin embargo, Luis Mejía dijo que la baja entre 11% y 12% en la tasa de interés les ha dado un respiro a los ferreteros que trabajan con línea de créditos.