La agrupación española de pop rock llenó el sábado el Teatro La Fiesta del hotel Jaragua
POR JORGE RAMOS C.
La empatía con el público, el dinamismo en escena y la calidad de la voz de Natalia Jiménez, hicieron que el grupo español La Quinta Estación recibiera la aprobación total de los dominicanos en su primera presentación en este país.
Con el teatro La Fiesta del hotel Jaragua completamente lleno, los ocho músicos y la vocalista, aparecieron en escena a las 9:10 de la noche en medio de fuertes gritos de un público juvenil y entusiasta desde el principio hasta el fin.
El tema que sirvió de apertura al concierto del sábado fue el éxito Tu peor error, luego siguieron Cosa de dos y Daría, este último de su ábum Flores de alquiler.
Es la primera vez que venimos a esta isla, pero esperamos volver, manifestó a viva voz Jiménez, quien hasta se alzó un poquito la larga falda para que sus jóvenes admiradores pudieran apreciar parte de la belleza de su cuerpo.
Acto seguido, la popular agrupación ibérica de pop rock tocó No soy nada, Algo más (la que más euforia provocó), Flores de alquiler, Niña, y Ahora que te vas.
Completaron el repertorio de la noche temas muy conocidos como El sol no regresa, Me muero y Tu peor error, para despedirse después de firmar unos cuantos autógrafos.
La Quinta Estación es un grupo de pop rock, procedente de España, compuesta por tres madrileños: la cantante Natalia Jiménez y los músicos Ángel Reyero (guitarra) y Pablo Domínguez (bajo).
Comenzó a sonar en 2001 y al día de hoy está cosechando los frutos de su triunfo por varios países, incluido México, donde su tercer álbum, El mundo se equivoca, ha sido un fenómeno de popularidad.
HISTORIA DEL GRUPO
La historia de la La Quinta Estación empieza en el 2001, cuando tres jóvenes madrileños Natalia Jiménez (cantante y armónica), Angel Reyero (guitarra) y Pablo Domínguez (guitarra y bajo), se unen para buscar un estilo que llegase a todo el mundo, pero que fuera diferente a todo lo que se escuchaba en el panorama musical español. Fueron muchos los ensayos en los locales de Hangar 19 (Canillas), fue ahí donde comenzó a gestarse el sonido del grupo. Más adelante se trasladaría a un local más amplio en Ritmo de compás (c/ Conde de Vilchis). Fue ahí donde posiblemente aprendieron más sobre música y sobre este universo en el que millones desean entrar. El grupo sabía perfectamente que el mundo de la música se compone de ganadores y perdedores, y ellos querían entran en el grupo de los que, a base de mucho esfuerzo y trabajo, ganan.
Así es como La Quinta Estación consiguió un aforo completo en la sala Ritmo & Compás en su primer concierto. Gracias a la ayuda de Marko Katier (arreglista de Lorca), logran dar un empujón al estilo y depura más sus líneas melódicas.
A finales del 2001 graban su primer maqueta con cuatro temas y con la participación de la formación final del grupo: Natalia (voz y armónica), Pablo (bajo y guitarra) y Angel (guitarra rítmica).
De esta manera, hoy por hoy hablar de La Quinta estación significa poder remitirnos al juego de sensaciones que se experimentan con un sonido potente y armonioso, a tararear de manera natural y contagiosa una letra, a sentir que el futuro augura cosas buenas, a paladear realmente el pop del siglo XXI.
Todos los miembros del grupo tienen calidad y sobre todo corazón, aportan su estilo personal y su experiencia profesional y por esto mismo están abiertos a nuevas posibilidades, a innovar y a hacer buena música, trabajando por y para ella.
Debido a su frescura, calidad musical y presencia, La Quinta estación llenó las expectativas de un proyecto: Clase 406, novela juvenil que se transmitió por Televisa. Desde su concepción, el productor de esta historia comenzó a buscar un tema musical que contribuyera de manera significativa al éxito de su telenovela; cuando escuchó Dónde Irán, tuvo la certeza de que definitivamente era el indicado.
COSITAS Y COSOTAS
Muchos que llegaron tarde se perdieron más de media hora de la actuación del grupo.
El concierto estaba anunciado para las 8:30 y 20 minutos después arrancó Irving Alberti con sus chistes.
La Quinta Estación comenzó su show a las 9:10. Todavía a las 10:00 estaban llegando personas.
La agrupación española goza de mucha popularidad entre la juventud, pues prácticamente el público coreó las 17 canciones.
La cantante y compositora del grupo, Natalia Jiménez, anima a la gente con sus gestos, energía y movimientos en el escenario.
Dos fanáticos no pudieron resistirse a la tentación de entregarle sendos paquetes de flores a la artista.
Por eso los flash de los celulares matizaron la noche musical que finalizó a las 10:40, para una duración del concierto de una hora y 30 minutos.