MOSCÚ. AFP. La prensa rusa expresó hoy su enfado e indignación por la eliminación de su selección de fútbol en la Eurocopa-2012, el sábado por la noche, al caer 1-0 ante Grecia, pese a que sólo necesitaba un empate para avanzar a los cuartos de final del torneo.  

«¡Nos habéis roto el corazón!», clamaba el tabloide Tvoi Den con un dibujo de dos diablos y un caldero, en el que estaban dentro el equipo ruso y su seleccionador holandés, Dick Advocaat.  

El diario popular Moskovsky Kmosomolets llegó a insultar a los jugadores, mientras que Sovetsky Sport les sentenció diciendo que son «menos que nada».  

En su portada, Tvoi Den volcó todas sus iras sobre Advocaat, que según los planes previstos dejará la selección rusa tras la Eurocopa-2012 para dirigir al PSV Eindhoven: «Vete al infierno, Advocaat», con una fotografía del seleccionador.  

«No piensan en el prestigio del fútbol en la madre patria, sino en sus primas económicas», afirma.   «Si vuestros hinchas asumen riesgos para ir a apoyaros a los estadios extranjeros hostiles, no tenéis derecho a perder. ¡En ningún caso! Y menos aún de una manera tan vergonzosa», comenta Tvoi Den, en alusión al revés 1-0 ante Grecia en el último partido del grupo A.  

Moskovsky Komsomolets ataca especialmente a la estrella del equipo, Andrei Arshavin: «Sus cabriolas en el terreno de juego muestras no sólo su holgazanería, sino lo poco que se puede esperar de él. Siendo precisos, lo que no hay esperar es nada bueno».  

Para Sport Express, «es evidente que Arshavin va a perder su inmunidad con el nuevo seleccionador», destacando el enfado de los hinchas. Un grupo de aficionados ebrios insultó a los jugadores delante de su hotel, obligando a intervenir a los servicios de seguridad del equipo.   Sovetsky Sport reconoce que «sólo Andrei Arshavin fue a aplaudir a los hinchas al final del partido».  

«30.000 hinchas rusos lloran, gritan su decepción, antes de callar cuando el equipo dejó el terreno de juego. Y (los jugadores) se fueron sin darles las gracias ni pedir disculpas», subrayó.  

La Eurocopa-2012 es «una página negra» de la historia del fútbol ruso, escribe el diario Kommersant.   Por su parte, el ministro de Deportes Vitaly Mutko declaró su decepción, reconociendo que los jugadores debían mejorar: «Es triste y molesto, pero tengo que decir que no puedo reprocharles nada, han luchado con todas sus fuerzas», dijo Sport Express.