GINEBRA. AFP. Unos 14 millones de personas mueren cada año por enfermedades infecciosas, en su mayoría en los países pobres, amenazando así su situación socio-económica, advierte el lunes la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR).
Según la FICR, la población de los países en desarrollo es particularmente vulnerable a las consecuencias de las epidemias, debido a estructuras de atención médica que no están adaptadas como corresponde.
Entre los 14 millones de víctimas anuales de enfermedades infecciosas, unos cuatro millones mueren a causa de enfermedades respiratorias y más de dos millones por enfermedades diarreicas.
El dengue, cuya tasa de mortalidad es baja, afecta a más de nueve millones de personas por año y por ende a la economía de los países afectados.