La mitad de las enfermeras del hospital Padre Billini, ubicado en la Ciudad Colonial, están enfermas, de licencia médica o requieren una pensión, lo que trastorna el quehacer diario del centro de salud.

Tan difícil es la situación, que fue menester una asamblea de enfermeras, el director y el jefe de los servicios regionales de Salud, doctor Enriquillo Matos.

El presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de Enfermería (Sinatrae), Julio César Cruceta, al hablar en  una reunión se refirió del maltrato al que supuestamente son sometidas las enfermeras y la presión que tienen porque las plazas están ocupadas por profesionales enfermas o muy mayores de edad.

Se denunció que la escasez de enfermeras hace que las  más jóvenes se enfermen, por el gran cúmulo de trabajo que tienen.

Demandaron respeto y que se nombre más personal de enfermería en el hospital. Los gremios convocaron un paro de actividades que se convirtió en una asamblea de dimes y diretes.

Hubo acusaciones de agresiones y de que se les había obligado a realizar labores, aún cuando algunas enfermeras estaban en licencia médica.

Al final de la asamblea, las enfermeras dieron un compás de espera al director de los servicios regionales de Salud para que resuelva la situación de un hospital que fue remodelado y entregado a la población hace poco tiempo.

El tema no es solo del hospital Padre Billini. Una situación similar viven el personal del hospital Darío Contreras y las del Luis Eduardo Aybar, mientras en el país muchas se van hacia otras naciones.