WASHINGTON (AP).- Los líderes militares están pasando apuros para decidir qué unidades del ejército permanecerán más tiempo en Irak y Afganistán o partirán para allá antes de lo planeado, y se les dificulta hallar nuevos soldados tras cinco años de guerra.

Ante un incremento de la fuerza militar en Irak que podría alargarse hasta el año entrante, funcionarios del Pentágono intentan identificar el suficiente número de unidades para mantener hasta 20 equipos de brigadas de combate en Irak. Una brigada generalmente consta de 3.500 soldados.

Probablemente el resultado será extender el período de servicio de aquellas brigadas que habrían de volver a casa cuando finalice el verano, y enviar a otras al frente antes de lo programado.

Cualquier decisión final que se tome, sucedería a la vez que el Congreso considera formas para obligar al presidente George W. Bush a retirarse de la guerra, pese a que se comprometió a que vetaría tal legislación.

El general de división Benjamín R. Mixon, comandante de las fuerzas de la coalición en el norte, dijo a reporteros el viernes que sus soldados han incrementado la frecuencia de los ataques contra el enemigo en la provincia de Diyala, al noreste de Bagdad.

“Podría utilizar más efectivos militares? Sin duda», expresó Mixon, e indicó que él había pedido más.

El máximo jefe militar de Estados Unidos en Irak, el general David Petraeus, dijo un día antes que es probable que se reubiquen fuerzas estadounidenses a áreas fuera de la capital donde los grupos extremistas se están reagrupando, incluyendo Diyala.

«Ha habido cerca de 30% más acciones ofensivas y ataques. Muchas de esas son iniciadas por nosotros; algunas las comienzan ellos», expresó Petraeus desde una base miltar a las afueras de Tikrit. «Soy cautelosamente optimista que en los siguientes 30 a 60 días vamos a ver algunas diferencias significativas en la situación de la seguridad en Diyala».

Si no es así, expresó, irá de vuelta y pedirá aún más apoyo.

Petraeus dijo el jueves que el incremento de fuerzas estadounidenses en Irak necesitaría ser sustentado «durante algún tiempo más allá del verano», para lograr los resultados que se necesitan.

Mantener el incremento en el número de efectivos militares, informaron funcionarios del ejército, requerirá que soldados regresen para lo que podría ser su segunda o tercera estadía en Irak o Afganistán, y forzar a los líderes militares a hacer malabares con la programación de soldados en servicio para dar a estos doce meses completos en casa antes de volver al frente.