Entérese cómo afectan las discusiones de pareja a los hijos

Entérese cómo afectan las discusiones de pareja a los hijos

Las peleas familiares ocasionales, que no esconden un problema de fondo, no alteran el equilibrio emocional de los hijos, Pero cuando se deben a un conflicto grave sus consecuencias sobre ellos son siempre negativas.

Los ojos infantiles saben interpretar el significado de cualquier movimiento del cuerpo -una arruga en el entrecejo, la forma de retorcerse las manos, la fuerte presión de labios, una mirada de ira y los infinitos matices de voz.

Los niños conocen bien ese lenguaje aunque todavía no entiendan las palabras. Ellos observan su entorno con mayor atención y saben leer mucho mejor que los adultos cada movimiento en el rostro de sus padres, especialmente cuando perciben un ambiente hostil e inseguro, como cuando se libra una pelea en casa.

El enfado y la reconciliación, las frustraciones, las quejas, la falta de entendimiento y la comunicación son sentimientos humanos que surgen en una vida de familia. La forma de resolver los problemas que se presentan es lo que marca la diferencia entre un ambiente familiar y otro. «Existe una forma de relacionarse en algunas familias que podríamos llamar violenta. Donde las cosas se piden a gritos, hay poca palabra, mucha acción y poca comunicación» explican expertos  con una dilatada experiencia en el conocimiento de las relaciones que se establecen en las familias y la huella que deja en los niños. «Un niño crecido en ese ambiente tendrá dificultades probablemente a la hora de reflexión y su trato con los demás y en la escuela será un tanto violento. Pero si no hay conflicto verdadero no tiene por que haber traumatismo psicológico.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas