Confenagro cree hay que hacer planificación de la producción

La situación con los precios de las materias primas y el alza de los productos en el país brinda una oportunidad para que el Gobierno haga una serie de reformas en el sector agropecuario, que ayuden a avanzar hacia una garantía de la seguridad alimentaria, además de bajar los precios de los productos a nivel local.

El planteamiento lo hizo ayer la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (Confenagro), que dice que para garantizar la seguridad alimentaria se requiere asumir una serie de acuerdos con el sector productivo nacional, en materia de planificación productiva, fomento, regulaciones, cambios estructurales y renovación de las leyes.

De acuerdo al presidente de Confenagro, Eric Rivero, entre las principales prioridades, ya presentadas en la Estrategia Nacional de Desarrollo Agropecuario, está lograr la planificación productiva de los principales sectores, lograr la rentabilidad de la actividad agropecuaria, a través de una política de comercialización y conseguir incentivos al sector.

También se necesita, dijo, impulsar servicios de calidad para la agropecuaria en materia de acceso al crédito y al seguro agrícola, tecnificación de riego y acceso al agua, investigación para el desarrollo, aseguramiento de la sanidad, extensión y capacitación.

“Hay preocupación por los recientes aumentos en los precios de los alimentos, pero estos se deben a varios factores, pero el principal es el aumento desproporcionado de las materias primas en el mundo, lo que se traduce en aumento de los productos terminados, que no son responsabilidad de los productores”.

De acuerdo al Banco Mundial los precios de la canasta básica aumentaron 20% en comparación con el 2020. La disminución de la oferta también afecta.

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Pacto Nacional
Los productores plantearon un “Pacto Nacional por la Seguridad y la Soberanía Alimentaria”, el cual someterán como propuesta al presidente Luis Abinader, que es contentivo de una serie de reformas impostergables, las cuales forman parte de la Estrategia Nacional de Desarrollo Agropecuario 2020-2030, aprobada por Confenagro.