El Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD) presenta una propuesta innovadora para enfrentar los desafíos del desarrollo territorial en la República Dominicana. La propuesta se centra en la creación de cinco mancomunidades regionales, denominadas “Mancomunidades Quisqueyanas,” con el objetivo de promover un desarrollo más equitativo y armónico en el país.

En un reciente informe, el CRD señala que el desarrollo de las regiones dominicanas no avanza al ritmo esperado desde la promulgación de la Ley 1-12 de la Estrategia Nacional de Desarrollo. Según el informe, las estrategias implementadas desde 2022 muestran un “considerable rezago en sus indicadores,” a pesar de los esfuerzos del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (Mepyd).

El Dr. Raúl Álvarez Sturla, director de la Comisión de Desarrollo Territorial del CRD, enfatiza que “el país debe acelerar los pasos para lograr el desarrollo que se ha proyectado. Las estrategias actuales no han sido efectivas y la creación de las regiones únicas revela diferencias notables que colocan a muchas en desventaja.”

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Cinco Mancomunidades

El CRD propone la formación de cinco mancomunidades regionales para resolver las deficiencias actuales. Estas mancomunidades estarían compuestas por agrupaciones de las 10 Regiones Únicas existentes, siguiendo la Ley 176-07 del Distrito Nacional y Los Municipios, que permite la asociación para la ejecución de proyectos comunes.

“Las Mancomunidades Quisqueyanas ofrecerán una solución efectiva al desacuerdo actual en la división territorial y permitirán una mejor alineación con los objetivos de la Estrategia Nacional de Desarrollo,” afirma el Ing. Manuel Núñez Yapor, director adjunto de la Comisión de Estrategias del CRD. “Estas mancomunidades crearán sinergias que multiplicarán los recursos y optimizarán el desarrollo regional.”

Las cinco mancomunidades propuestas son: Mancomunidad Quisqueyana Cibao-Norte: Integrada por Cibao Norte y Cibao Noroeste; Mancomunidad Quisqueyana Cibao Central, Integrada por Cibao Sur y Cibao Nordeste y la Mancomunidad Quisqueyana del Gran Higuey: Integrada por Yuma e Higuamo. Asismismo propone la Mancomunidad Quisqueyana Gran Jaragua: Integrada por Valdesia, Enriquillo y El Valle, y la Mancomunidad Quisqueyana del Gran Santo Domingo: Integrada por la Región Metropolitana/Ozama.

Beneficios para áreas rurales

Las mancomunidades prometen transformar las áreas rurales a través de una serie de beneficios significativos:

Cooperación y sinergia: Permitirán la colaboración en proyectos conjuntos, mejorando la infraestructura y servicios básicos.

Desarrollo sostenible: Facilitarán la gestión responsable de los recursos naturales y la promoción de prácticas agrícolas responsables.

Acceso a fondos y programas: Facilitarán el acceso a fondos y programas de desarrollo.

Mejora de servicios: Optimizarán la prestación de servicios básicos como agua potable y educación.

Empoderamiento local: Fortalecerán la participación de las comunidades en la toma de decisiones.

Propuestas de solución

A pesar de los beneficios, el CRD reconoce que la implementación de las mancomunidades enfrentará desafíos como el financiamiento insuficiente y la coordinación intermunicipal compleja. El Dr. Álvarez Sturla y el Ing. Núñez Yapor coinciden en que “superar estos desafíos requiere un compromiso continuo y una visión compartida de desarrollo local”.

El CRD hace un llamado urgente a las autoridades y a los actores locales para adoptar esta estrategia. “Es imperativo que apostemos por una nueva estrategia que permita alcanzar el desarrollo programado,” concluye el Ing. Núñez Yapor.

La propuesta busca rectificar las deficiencias y establecer un modelo de desarrollo regional.