Las principales instituciones vinculadas al desarrollo de la acuicultura en el país firmaron un compromiso para la ejecución de las Estrategias para el desarrollo de la acuicultura  para los próximos cinco años. 

El convenio fue firmado por el Instituto Dominicano de Investigaciones Agropecuaria y Forestales (Idiaf), la Misión Técnica de Taiwán en el país, la Asociación Dominicana de Acuicultores (Adoa), el Banco Agrícola y el Consejo Nacional de Producción Pecuaria.

 La ejecución de las estrategias en el país permitirá el desarrollo y fortalecimiento de manera sostenida de la producción acuícola, basada en la aplicación de políticas adecuadas en diez ejes fundamentales: financiamiento, inocuidad (higiene y sanitaria), medio ambiente, producción, asociatividad, mercadeo, promoción, investigación y capacitación.

Con su aplicación se espera incrementar significativamente la producción, sobretodo de pescado, tanto para el consumo local como para la exportación, con el objetivo de alcanzar las 7 mil toneladas métricas en los próximos 4 años.

Eso implicaría una inversión cercana a los RD$500 millones  en el mediano plazo para apoyar la puesta en operación de 150 hectáreas de espejo de agua en estanques existentes, más los proyectos de producción de peces en jaulas flotantes en aguas marinas y dulce.

El país tiene cerca de 500 hectáreas de estanques en tierra y se espera superar los 30 mil metros cuadrados en instalaciones de jaulas flotantes marinas e igual superficie en jaulas en aguas interiores, a mediano plazo, informó el presidente de ADOA, Máximo Nicolás Goico. Planteó a las autoridades entrantes un programa inmediato de financiamiento para los pequeños y medianos productores, el cual se ejecutaría en convenio con el Bagrícola.

Pidió el establecimiento de un fondo de garantía para hacer viable el acceso de los productores acuícolas al programa, en el que solo se financiarían insumos (alevines, alimentos, fertilizantes, etc.),  utilerías y equipos acuícolas y pequeñas infraestructuras de procesamiento de pescados, entre otros. El acompañamiento técnico a los productores debe formar parte de este programa. Nicolás Goico garantizó que el desarrollo de la producción acuícola es una alternativa viable y rentable para la producción de proteína de calidad para la población dominicana.

Agregó  que el subsector acuícola será el de mayor crecimiento en los próximos 10 años, de acuerdo a la FAO. La actividad se realizó  en el Idiaf y cuenta además con el apoyo del Ministerio de Medio Ambiente, el Consejo Dominicano de Pesca y Acuicultura,  la Dirección General de Normas y Sistemas  y el Instituto Nacional de  Recursos Hidráulicos. Asistieron  Rafael Pérez Duvergé, director del IDIAF; Nicolás Goico, presidente de Adoa; Wen Hsu, en representación de la Misión Técnica de Taiwán; Félix A. Gerónimo, del Bagrícola, y técnicos y consultores del proyecto, así como productores de acuicultura.

La acuicultura dominicana, que se inició en la década de los 50 por iniciativa de la FAO, no se ha podido desarrollar por una serie de factores que le han sido adversos, según el documento de las estrategias para su desarrollo.

Agrega que “no existen políticas claras para su desarrollo y tampoco existen los instrumentos de política necesarios. 

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Historia acuicultura

La acuicultura en el país comenzó en  los años 50 por iniciativa de la FAO, acompañada por el establecimiento de la primera finca experimental en Nigua, San Cristóbal. Se introdujo la tilapia,  lobina  y carpa común. En los 70 fueron introducidos el langostino de Louisiana y otras especies de tilapia. La iniciativa privada arrancó en  los 80 con la construcción de la primera finca de camarones de agua dulce, en  Bayaguana.