El sistema de fondos de pensiones manejado por el sector privado ha fracasado porque no garantiza pensiones dignas ni un plan de retiro a los trabajadores, afirmaron ayer la Fundación Juan Bosch, la Fundación Sol de Chile y la organización internacional Médicos del Mundo.
Al presentar los resultados de una investigación sobre pensiones y seguridad social, las tres entidades criticaron que las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) hayan aumentado sus beneficios, mientras los trabajadores optan a pensiones de miseria.
Matías Bosch, presidente de la Fundación Juan Bosch, precisó que entre 2004 y 2015 las ganancias de las AFP superaron los 500 millones de dólares, lo que rebasa la rentabilidad obtenida para los fondos que administran.
Señaló que durante ese período “el negocio de las AFP registró una rentabilidad anual promedio sobre su patrimonio de 35.8%, mientras la rentabilidad real anualizada de los fondos ha sido de 4.98%”.
Bosch indicó que el 69.9% de los fondos de pensiones administrados por las AFP están invertidos en instituciones públicas, como mecanismos financieros emitidos por el Banco Central, lo que permite que el Estado tenga mayor liquidez y pueda enfrentar el gasto público y la capitalización de ese banco estatal.
Igualmente propuso un rango de beneficios según las cotizaciones aportadas por los empleados durante su vida laboral.
Explicó que ese plan consiste en que una persona que se retire después de 30 años de trabajo, reciba una pensión con el 80% de su salario. En tanto el que se retire con 25 años de labores, reciba el 70%.
Matías Bosch destacó que el Instituto Nacional de Bienestar Magisterial (Inabima) tiene un plan de retiro que beneficia a los trabajadores, ya que reciben una pensión de un 68.8% de su salario, mientras que el resto de los trabajadores solo alcanza un 22.8%.
El informe de la investigación fue divulgado con motivo de los 15 años de la creación del Sistema de Seguridad Social mediante la ley 87-01, del año 2001.