Entradas, un preámbulo de sabor

Entradas, un preámbulo de sabor

POR MARGARITA QUIROZ
Lo que diariamente las personas comen y el horario a que acostumbran hacerlo está determinado, según los especialistas, no sólo por el apetito, sino también por factores culturales y sociales que varían entre las distintas regiones y países. De igual modo, estos factores influyen en el número de comidas que se ingieren.

Culturalmente los dominicanos acostumbran hacer tres comidas: desayuno, comida y cena. En ocasiones, específicamente por las tardes, meriendan, pero muy rara vez consumen algún tipo de entrada, al menos que visiten un restaurante.

Para los estadounidenses y básicamente los europeos consumir una entrada o aperitivo antes de la comida fuerte del día, forma parte tradicional de su dieta.

También, algunos latinoamericanos se incluyen en la lista, como los peruanos, mexicanos y chilenos. Por lo visto, a estos ciudadanos del mundo les importa comino el dicho que reza «hambre que espera hartura no es hambre».

Como bien explica la experta en cocina, Eugenia Rojo, las entradas son pequeños platillos que se sirven para preparar el estómago ante de consumir el plato fuerte.

Y según el gusto del comensal se pueden consumir frías o calientes.

Es, en resumen, una especialidad culinaria que hace llevadera la espera del primer plato y a la vez excita las glándulas que segregan los jugos gástricos para recibir con honor la comida fuerte. Si bien en algunos países, la entrada está constituida, casi exclusivamente por algunas bebidas, en otros, siempre se acompaña de algún elemento sólido, que sirva para despertar el apetito. Este tipo de comida debe ser ligera y con sabores no muy fuertes, para no saciar el estómago de una vez.

El vino se ha constituido en la entrada o aperitivo más consumido a nivel mundial, mientras que, si de alimento líquido se habla, la sopa y el consomé adquieren un carácter protagónico.

Las entradas a base de hortaliza o verduras siempre resultan una estupenda opción, sobre todo para aquellas personas que permanecen a dieta.

Los frutos secos son tan ricos como nutritivos, ideales tanto para entrada como para picar entre horas. Resulta más recomendable comprar los frutos secos frescos con cáscara que los que se comercializan ya pelados, estos últimos suelen ser muy ricos en sal y grasas.

Otra opción son las aceitunas de mesa: negras, verdes, con o sin hueso, rellenas, enteras o troceadas. Estas además forman parte de apetitosas ensaladas, platos de pasta y de arroz, derivados cárnicos, patés y salsas, o junto con otros componentes, de rellenos de carnes y pescados, enriqueciéndolos desde el punto de vista nutritivo y gastronómico. Los embutidos y quesos también resultan agradables antes la espera de la comida y sobre todo sí el hambre «aprieta».

Pero indudablemente, las sopas y consomés se han constituido como las más preferidas sobre todo si se elaboran a base de auyama, perejil, cebolla, ajo, pescado o pollo.

Si las entradas son saludables o no es un tema de discusión. Algunos expertos afirman que su presentación en la mesa no tiene razón de ser, porque cuando llega el plato fuerte, el estómago ya está saciado. Otros, consideran que son alimentos con alto contenido en grasa y azúcar y, por lo tanto, son «malos» y «engordan». Este planteamiento, se debe a que en ocasiones se sirven como entradas alimentos fritos, como croquetas, quipes, pastelitos, bastoncitos de pescados, cóctel de camarones, entre otros.

Pero lo que está claro es que si a usted le agrada comer, y presentar variedad en la mesa, una entrada, aperitivo, tentempiés o tapa, como se le denomina en diferentes países, nunca cae mal.

SOPA DE AJO

Ingredientes:

Pan
Pimentón
Cebolla
Ajo
Agua
Aceite de oliva.
Huevo

Preparación:

Se parte pan del día anterior en láminas. En una sartén se fríe la cebolla y los ajos picados. Cuando está la cebolla dorada se agrega media cucharadita de pimentón y se retira del fuego para que el pimentón no se queme. A continuación se echa el pan y se rehoga. Se cubre todo con agua y se deja cocer. Cuando esté cocida se incorpora un huevo a la sopa, de manera que cuaje.

BERENJENA RELLENA

Ingredientes:

2 berenjenas
8 lonjas de queso
4 lonjas finas de jamón Serrano
1 ó 2 huevos
4 cucharadas de harina
Pan rallado
Ajos
Cáscara de limón
Aceite de oliva
Sal al gusto

Preparación:

Cortar las berenjenas en rodajas finas y ponerlas a remojo durante media hora en agua con sal y la cáscara de limón para eliminar el amargo. Majar el ajo. Batir los huevos y mezclarlos con el ajo, la harina y la sal.

Pasado el tiempo de remojo, escurrir las berenjenas, colocar una lonja de queso y otra de jamón Serrano entre dos rodajas de berenjena y pasarlo por huevo y pan rallado.

Freír las berenjenas y colocarlas en papel absorbente para que escurra el exceso de aceite.

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