Hoy 
El municipio Santo Domingo Norte es un vertedero. El hedor y las ratas se han tornado insoportables en esa localidad, arrabalizando el sistema de transporte más moderno del país, el Metro de Santo Domingo, que no tiene siquiera dos años de funcionamiento.
Los montones de desechos sólidos están por todas partes, hasta el elevado del Metro lucía ayer cubierto de desperdicios, llamando la atención de quienes residen en el área.
Estos atribuyen la situación al descuido del Ayuntamiento de Santo Domingo Norte, cuyo alcalde, Jesús Féliz, cesa hoy en sus funciones, cuando asuma Francisco Fernández.
Más adelante, a poca distancia de la estación del Metro Mamá Tingó, los moradores de los sectores aledaños se han visto obligados a sacar los desperdicios a la avenida Hermanas Mirabal y hasta la isleta del elevado de ese medio de transporte, que es tomada como recipiente de desechos sólidos.
La basura ha copado hasta el frente del Parque Mirador Norte, principal pulmón ecológico de Villa Mella, donde se observan vertederos a pocos metros de distancia, un área que utilizan los munícipes para caminar, visitar y ejercitarse, cada día.
Como los camiones recolectores no entran al sector Colonia de los Doctores, sus moradores sacan los desperdicios y han formado un vertedero frente a la planta envasadora de agua potable Lily, por donde los peatones cruzan con las narices tapadas porque no soportan el hedor.
Lo mismo ocurre frente a La Senda, Santa Cruz, Sol de Luz, Barrio Nuevo y El Edén, en el Primaveral, pero la situación es todavía más grave en la carretera Villa Mella-San Felipe-Punta, convertida en un gran basurero, debido a que los camiones no entran a los sectores ubicados a lo largo de esa vía.
Sabana sigue perdida. En Sabana Perdida, los vertederos se suceden a pocos metros uno del otro, por lo que provocó que hasta el sector comercial lanzara el grito al cielo por la insalubridad en sus alrededores.
Manuel Marte, encargado de la tienda Ray Muebles en Sabana Perdida, se vio obligado a abandonar sus oficinas en la avenida Los Restauradores esquina 13, en el cruce, debido a que un vertedero fue improvisado frente a la puerta de entrada.
En Villa Blanca hay una loma de desperdicios que mete miedo a los vecinos y a quienes están obligados a pasar por la avenida Los Restauradores.
Frente a los negocios de comida, repuestos para vehículos y otros comercios, el vertedero crece cada día, también la presencia de ratas y otras alimañas poniendo en peligro la salud, narró Humberto García.
La herencia
Francisco Fernández, quien jura este lunes como alcalde del municipio Santo Domingo Norte, hereda una localidad repleta de desechos sólidos, con vertederos en cada calle y avenida, a pocos metros uno de otro. Fernández deberá iniciar de inmediato con una amplia operación de recolección de desechos sólidos, utilizando los cientos de camiones que les dieron apoyo al final de su campaña electoral en mayo pasado. De igual modo, deberá enfrentar en sus primeros cien días acciones para conjurar la cantidad de hoyos en importantes vías como la propia Hermanas Mirabal, especialmente donde se inicia el elevado del Metro de Santo Domingo, la entrada del residencial Remanso, Sol de Luz y otros.
