WASHINGTON (AP).- El presunto terrorista José Padilla, detenido por las autoridades federales, se entrenaba para dinamitar hoteles y edificios de apartamentos en Estados Unidos, además de detonar posiblemente una «bomba sucia» radiológica, según documentos gubernamentales.

Los documentos, difundidos el martes por el departamento de Justicia, indicaron que Padilla y un cómplice de al-Qaida iban a entrar en Estados Unidos procedentes de México o Puerto Rico.

«Padilla y el cómplice tenían que seleccionar por lo menos tres edificios altos de apartamentos que tuvieran gas natural en sus pisos», indicó un sumario gubernamental basado en los interrogatorios de los sospechosos.

«Iban a alquilar dos apartamentos en cada edificio, para sellar puertas y ventanas, abrir las llaves del gas y montar temporizadores para detonar simultáneamente los edificios en un momento posterior», agregaron los documentos.

Cabecillas de al-Qaida «querían que Padilla atacara objetivos en Nueva York, aunque también hablaron sobre Florida y Washington DC», indican los documentos.

Padilla debía buscar en la internet construcciones que tuvieran un sistema de calefacción de gas natural, abrir una cuenta y obtener los documentos necesarios para alquilar un apartamento.

El plan era volar 20 edificios de forma simultánea, pero Padilla no iba a poder alquilar tantas residencias sin levantar suspicacias.

El Departamento de Justicia, presionado para que explique la detención indefinida de ciudadanos estadounidenses como «combatientes enemigos», detalló los presuntos entrenamientos de Padilla en Afganistán y sus contactos con los mandos de al-Qaida, su regreso a Estados Unidos y sus preparativos para alquilar apartamentos y detonar explosivos.

El subsecretario de Justicia James Comey dijo que los planes de Padilla fueron «notables por su extensión, su claridad y su candor».

Comey agregó que Padilla sugirió a sus superiores que podía detonar una bomba nuclear que, según creyó, podría montar siguiendo las instrucciones que figuran en la internet, o que podría detonar una bomba con materiales radiactivos en una zona reducida. Sus superiores no creyeron que esas dos ideas fueran factibles, dijo Comey, y en lugar de ello deseaban que se centrase en el plan para destruir el edificio de apartamentos.