Hoy 
POR ROSARIO TIFÁ
Suntuosidad en el vestuario, alegría y disciplina en la organización, fueron parte de las condiciones que se destacaron en el desarrollo de la elección de Claudia Cruz, coronada como representante del país para el concurso Miss Mundo que se celebrará el próximo mes en China. Miss República Dominicana Mundo recibió desde el inicio del conteo regresivo la aprobación del jurado y del público que a través de internet y los canales de Color Visión daba seguimiento al concurso.
En la actividad, conducida por el venezolano Gary Matos y Jatnna Tavarez, ocupó la posición de primera finalista Wilma Abreu Nazario, y la segunda posición fue para Genevet Gutiérrez.
Julissa Alcántara, Desidere Álvarez y Mónica Angulo completaron la lista de las seis candidatas escogidas por un jurado, durante un proceso de dos semanas dispuesto para la organización del evento. Angulo, además, recibió un contrato durante un año para trabajar junto a Rafael Corporán de los Santos en la conducción de su espacio Sábado de Corporán.
Cruz fue coronada por María Eugenia Vargas, Miss República Dominicana Mundo 2003.
Las seis candidatas estaban representadas por letras del alfabeto y de esa manera eran identificada, además por su nombre cuando salieron vestidas con los diferentes trajes confeccionados por los diseñadores Martín Polanco, la firma Chapoteo y Leonel Lirio.
La suntuosidad fue comprobada en la elaboración de los trajes de apertura compuestos por elegantes y coloridos conjuntos de pantalón y guayaberas en organdí suizo del diseñador Martín Polanco, seguido de diminutos biquinis en estampado fucsia de la marca Chapoteo.
Esa misma condición quedó expresada en los trajes de noche de Leonel Lirio engalanados con elegantes accesorios de la casa Canoa.
El gran colorido, una característica de los países caribeños como el nuestro, se extendió hasta el vestuario que lucieron la merenguera Milly Quezada, Ballet Folclórico de la Secretaría de Turismo, Grupo Negros y Ramón Orlando, artistas que con sus actuaciones hacían saltar de sus asientos al auditorio.
La disciplina, no usual en este tipo de evento, se constituyó en uno de los principales elementos en la conducción y organización del evento y atenciones dentro del escenario.
El concurso se realizó a beneficio de la Fundación Acción Callejera de Santiago y Casa Rosada de Santo Domingo.
Una comisión de la provincia encabezada por el síndico Ignacio Martínez reciprocó esa distinción entregando un pergamino que declara a Jatnna Tavarez, Hija Adoptiva de la comunidad.
La organización del evento entregó un trofeo a Jeannette Dotel Monte de Oca, primera candidata que representó al país en 1966 en el concurso Miss Mundo, donde quedó segunda finalista. Idelsa Núñez, finalista que años después en ese importante certamen, le entregó el reconocimiento a Dotel.
El Jurado estuvo presidido por Francisco Sanchís e integrado por Amelia Álvarez, Idelsa Núñez, Hans Danmemberge, viceministro de Turismo, Lissete Selman, Yadira Morel, Evelyn Díaz, Margarita García, Sócrates Mackinney, Zoila Luna, Enrique Aguilera. Refrendó el acto Juan Lebrón, notario público autorizado.
