Un mayor PIB e inversión extranjera, mejores estructuras productivas, un clima de competitividad favorable, además de la cercanía son los elementos que estimulan la migración haitiana hacia la República Dominicana, según los economistas Juan Del Rosario Santana y Wagner Gomera Aquino en un articulo de la Unidad de Estudios de Haití del Centro de Estudios P. Alemán de la PCUMM.

Refieren que la Encuesta Nacional de Inmigrantes (ENI) reveló que el 75.8% de los haitianos emigra a República Dominicana por motivos económicos, como búsqueda de empleo o de mejores condiciones de vida. Contrastan que mientras el PIB per cápita de Haití en 2017, apenas alcanza los 775 dólares, en República Dominicana era de 7,049 dólares, es decir, 8.9 veces mayor.

“En adición, en el caso haitiano existe una industria débil y un empresariado básicamente informal y en la dominicana, una industria fuerte y un empresariado más formal”, subrayan en su análisis.

También que en el caso haitiano la Inversión Extranjera Directa (IDE) va en descenso, con apenas 109 millones de dólares en el 2015 y en el lado dominicano en ascenso de más de 2,200 millones de dólares en ese año.

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Asimismo, en Haití, un sector terciario caracterizado por servicios personales con un fuerte sector informal, pero con un enfoque hacia la industria poco dinámico, y en República Dominicana, un sector servicios dirigido a las empresas y las personas, con fuerte énfasis en la industria.

Además señalan que Haití ha ocupado niveles inferiores en varios indicadores de competitividad internacional y de desarrollo humano.

En el caso de los ingresos por concepto de remesas, los economistas señalan que en Haití, en el 2017 se estimaban en unos 2,772 millones de dólares, un 33.6% del PIB de ese país, mientras que en el lado dominicano estas se estimaban en 5,895 millones de dólares, equivalente al 7.8% del PIB.

Una población mayoría rural

El informe destaca que la población haitiana es mayormente rural (64%) con tan solo un 49.6% de la PEA ocupada y con un 93% trabajando en el sector rural, básicamente en la agricultura.

“La situación de estancamiento de este sector se convierte en un expulsor de mano de obra haitiana, en un contexto en el que los dominicanos abandonan la zona rural, por lo que la agropecuaria dominicana se constituye en un factor de atracción de la mano de obra”.