Epidemias obstaculizan desarrollo del Caribe

Epidemias obstaculizan desarrollo del Caribe

POR FIOR GIL
El embajador dominicano ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Roberto Alvarez Gil, advirtió que algunas enfermedades epidemiológicas como la malaria, la tuberculosis y el SIDA constituyen una amenaza para el desarrollo de la región del Caribe, zona que ocupa el segundo lugar de la epidemia de VIH en el mundo.

Alvarez Gil afirmó que el nivel de casos de SIDA que se registra en Haití fluctúa entre un 5.2 y un 5.6% de la población, por ciento que amenaza con explotar geométricamente.

«Esta situación no es solo un problema haitiano, tiene necesariamente que ser enfocado como una pandemiologia solidaria por toda la región», dijo el embajador.

Al mismo tiempo consideró que la crisis en Haití en un problema de seguridad nacional para la República Dominicana.

El embajador Alvarez Gil se expresó en esos términos al pronunciar un discurso en la sesión plenaria del Consejo Permanente de la OEA, el pasado jueves, en Washington, en el cual abogó por una solución a la crisis política en Haití.

Dijo que la solución haitiana que pasa por elecciones nacionales como un medio y no como un fin a la crisis y consideró que Haití precisa primero de seguridad ciudadana y después reformas políticas duraderas. «Una estabilidad razonable de largo plazo a la situación haitiana es imposible sin la creación de fuentes de empleos para el pueblo haitiano», enfatizó.

Informó que un nuevo informe del Banco Mundial publicado en el transcurso de esta semana analiza el impacto del Tratado de Libre Comercio entre los Estados Unidos y cinco naciones Centroamericanas y la República Dominicana, dice que el acuerdo promete aumentar el comercio y la inversión, promoviendo el crecimiento económico y la reducción de la pobreza en América Central y en la República Dominicana.

Alvarez Gil insistió en la necesidad de asistencia técnica para la República Dominicana a fin de poder regularizar el tema migratorio con relación a Haití, dentro del derecho soberano dominicano «a establecer el marco reglamentario, en función de las normas del derecho internacional, que mejor convenga a nuestro interés nacional».

Sostuvo que a pesar de los esfuerzos y recursos invertidos por la comunidad internacional, estos no parecen ser todavía proporcionales para las grandes necesidades y retos de que enfrenta el vecino país.

Asimismo agradeció a todas las naciones latinoamericanas y caribeñas que contribuyen con gran sacrificio a través de Minustah y otras entidades para estabilizar y pacificar la situación haitiana.

«Reconozco a nombre de mi país los esfuerzos de la OEA en Haití y en particular la sangre, el sudor y las lágrimas que ha vertido el secretario general adjunto, Luigi Einaudi, en pos de una solución a la crisis haitiana. Gracias también agradezco a nombre de la República Dominicana a los países e instituciones donantes que han ofrecido acelerar la asistencia económica tan apremiante para el pueblo haitiano», enfatizo el embajador Alvarez Gil.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas