La Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), aunque existía desde 1954 como Comisión Episcopal Nacional de la República Dominicana, es a partir del 22 de septiembre de 1962 que oficialmente queda constituida cuando la Santa Sede aprobó sus estatutos “ad experimentum”.
La CED es una institución de carácter permanente, en la cual los obispos dominicanos ejercen unidos diversas funciones pastorales respecto de los fieles del territorio nacional. “La Conferencia del Episcopado Dominicano existe para facilitar la tarea de cada obispo en particular, y el presidente está para coordinar el trabajo de esta institución que la Iglesia sabiamente ha consolidado, le ha dado carácter, para favorecer la obra que cada obispo debe hacer en su Diócesis”, explicó Mons. Freddy Bretón Martínez, arzobispo de Santiago de los Caballeros y presidente de la CED, durante una entrevista en el programa de la CED “La Voz de los Obispos”.
El Episcopado tiene como objetivos: promover la misión y función de la Iglesia, formas y modos de apostolado como la promoción y tutela de la fe y las costumbres, la planificación pastoral, la traducción de los libros litúrgicos, la promoción y formación de las vocaciones sacerdotales; y la elaboración de materiales para la catequesis.
También, la promoción y tutela de las universidades católicas e instituciones educativas, el compromiso ecuménico, las relaciones con las autoridades civiles, la defensa de la vida, la paz y los derechos humanos, la promoción de la justicia social, así como el uso de los medios de comunicación social.
En ese sentido, los obispos, a través de la amplia estructura de la institución, han aportado durante más de sesenta años a los mejores intereses del pueblo dominicano mediante el acompañamiento institucional en diversas causas nacionales, la creación de distintos organismos de servicio en los campos de la educación, la salud, los derechos humanos, obras de caridad y situaciones de emergencia, además con documentos de orientación de carácter pastoral y socio político, como las Cartas Pastorales y los Mensajes.
Sobre su historia. En 1954 se creó la primera “Comisión Episcopal Nacional de la República Dominicana”, con anterioridad a la primera Conferencia General del Episcopado Latinoamericano de Río de Janeiro (1955). Más tarde, en 1963 se celebra la Primera Asamblea Plenaria y en 1966 se crean las primeras Comisiones Episcopales.
Desde entonces han sido presidentes de la CED (1955-2020): Monseñor Octavio Antonio Cardenal Beras Rojas†; Monseñor Juan Antonio Flores Santana †; Monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito†; Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez; Monseñor Ramón Benito De la Rosa y Carpio; Monseñor Gregorio Nicanor Peña Rodríguez; Monseñor Diómedes Espinal De León y Monseñor Freddy Antonio de Jesús Bretón Martínez (actual).
Sobre su estructura. Para cumplir con sus objetivos la CED cuenta con una estructura organizacional que evoluciona según las necesidades pastorales de la República Dominicana.
En ese orden, los organismos que integran la Conferencia son el Consejo permanente, la Presidencia, la Secretaría General, la Comisión Económica y Financiera, así como la Dirección de Comunicación y Prensa.
Asimismo, incluye comisiones especiales: la Conferencia Dominicana de Religiosos (CONDOR), el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), el Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino, la Comisión de Asesoría Legal, y las Obras Misionales Pontificias (OMP). De igual forma, las siguientes instituciones: la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), el Instituto Nacional de Pastoral (INP), y el Tribunal Eclesiástico.
Finalmente, integra comisiones episcopales, que trabajan diversos ámbitos del ser humano y su desarrollo, siendo estas: Formación y Espiritualidad, Palabra y Liturgia, Familia, Pastoral Social, Educación y Movilidad Humana. Estas, a su vez, agrupan las comisiones nacionales de pastoral, entre las que se encuentran la Pastoral Juvenil, Ecología y Medio Ambiente, Penitenciaria, Pastoral de Vida, de la Salud, entre otros, responsables de asistir a los más vulnerables y poniendo en práctica la Doctrina Social de la Iglesia Católica.
Obispos fallecidos. En este 58 aniversario, el Episcopado recuerda a los obispos que han partido a la casa del Padre, iniciando por sus fundadores: Monseñor Octavio Antonio Beras Rojas, arzobispo metropolitano de Santo Domingo y primer cardenal dominicano; Monseñor Hugo Eduardo Polanco Brito, obispo de Santiago de los Caballeros; Monseñor Francisco Panal Ramírez, O.F.M. Cap., obispo de La Vega; Monseñor Juan Félix Pepén Solimán, obispo de Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey, y Monseñor Tomás Francisco Reilly, C.S.S.R., prelado nullius de San Juan de la Maguana.
También, a los pastores Monseñor Ronald Gerard Connors, C.S.R., obispo emérito de San Juan de la Maguana; Mons. Roque Antonio Adames Rodríguez, obispo emérito de Santiago de los Caballeros, y Monseñor Jerónimo Tomás Abreu Herrera, obispo emérito de Mao-Montecristi.
De igual modo, la CED agradece los años de servicio de los obispos Mons. Francisco José Arnáiz Zandona, S.J., obispo auxiliar emérito de Santo Domingo; Monseñor Juan Antonio Flores Santana, arzobispo emérito de Santiago de los Caballeros; Monseñor Amancio Escapa Aparicio, O.C.D., obispo auxiliar emérito de Santo Domingo; Monseñor Pablo Cedano Cedano, obispo auxiliar emérito de Santo Domingo, y Monseñor Fabio Mamerto Rivas Santos, S.D.B., obispo emérito de Barahona.
Obispos actuales. En la actualidad, la Conferencia del Episcopado Dominicano está conformada por Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez, arzobispo emérito de Santo Domingo; Mons. Freddy Antonio de Jesús Bretón Martínez, arzobispo metropolitano de Santiago de los Caballeros y presidente CED; Mons. Héctor Rafael Rodríguez Rodríguez, M.S.C., obispo de La Vega y vicepresidente del Episcopado; Mons. Francisco Ozoria Acosta, arzobispo metropolitano de Santo Domingo; Mons. José Dolores Grullón Estrella, obispo de San Juan de la Maguana; y Mons. Diómedes Espinal de León, obispo de Mao-Montecristi.
De igual manera, Mons. Julio César Corniel Amaro, obispo de Puerto Plata; Mons. Víctor Emilio Masalles Pere, obispo de Baní; Mons. Fausto Ramón Mejía Vallejo, obispo de San Francisco de Macorís; Mons. Andrés Napoleón Romero Cárdenas, obispo de Barahona; Mons. Jesús Castro Marte, obispo de Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey; y Mons. Santiago Rodríguez Rodríguez, obispo de San Pedro de Macorís.
Asimismo, Mons. Tomás Morel Diplán, obispo auxiliar de Santiago de los Caballeros; los obispos auxiliares de Santo Domingo: Mons. Faustino Burgos Brisman, C.M. (secretario general CED), Mons. Ramón Benito Ángeles Fernández, y Mons. José Amable Durán Tineo.
Finalmente, Mons. Ramón Benito De la Rosa y Carpio, arzobispo emérito de Santiago de los Caballeros; Mons. Príamo Tejeda Rosario, obispo emérito de Baní; Mons. Jesús María De Jesús Moya, obispo emérito de San Francisco de Macorís; Mons. Antonio Camilo González, obispo emérito de La Vega; Mons. Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, obispo emérito de Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey; Mons. Rafael Felipe Núñez, obispo emérito de Barahona, y Mons. Valentín Reynoso Hidalgo, M.S.C., obispo auxiliar emérito de Santiago de los Caballeros.