La Agenda de Cultura para el Desarrollo analizó los equipamientos culturales de la ciudad de Santiago. Es decir edificaciones, parques, plazas, calles, aceras, y otros espacios públicos que se utilizan en animaciones socioculturales. Consejo Estratégico (CDES), Centro León, Ministerio de Cultura, Ayuntamiento y 250 artistas, demuestran que hay una cantidad importante de equipamientos que agregan poco valor al trabajo de los creativos visuales y escénicos.
Estudiamos funciones, distribución, logística y la relación con la demanda cultural que acontece en los equipamientos. Hay edificios culturales concentrados en el Centro Histórico, cuya calidad, capacidad museográfica, formativa y expositiva debiera ser mejorada.
Registramos 355 equipamientos culturales formales, a razón de seis equipamientos por cada 10,000 habitantes urbanos (1 cada 540 familias) en una población de 650 mil habitantes. La cantidad desde el año 2005 han crecido en 10%, así no la calidad de edificios culturales.
El 81% de los equipamientos se utilizan en procesos de comercialización, como impresión, teatro, artes visuales, ventas de libros, artesanías y obras. Asimismo galerías, radioemisoras, televisión, servicios publicitarios, cines y teatros.
Apenas el 19% se utiliza en formación, investigación y capacitación de audiencias, lo que coincide con el diagnóstico de las industrias creativas y la animación sociocultural, que evidencian insuficiencias en capacitación en administración, estética, crítica y museografía.
Asimismo la gestión de los equipamientos orientados a las artes visuales constituye un desafío en materia de sostenibilidad. Igualmente se realizó un análisis cruzado de la relación existente entre los equipamientos culturales con la práctica de artes visuales, música, danza, literatura, teatro, escenografía del carnaval, artesanía, fotografía, cine y video.
La ciudad de Santiago registra 108 espacios públicos utilizados en animación, dentro de estos los más frecuentemente son las calles y avenidas para un 88%; los parques apenas son utilizados en animaciones socioculturales en un 10%. Dado los costos de ambientación como tarimas, carpas, sillas, sonidos, luces, mesas y baños.