“Ahora hacen los partidos entre jueces y cantantes. Tendríamos que hacer uno entre los ministros y la mafia: en resumen, un partido amistoso.”

Roberto Benigni

La complicidad le es a la mafia lo mismo que un fusil a un soldado, inseparables, imprescindible, fundamental e inevitable. A cada mafia su contraparte en las instituciones llamadas a combatirla.

Lo evidenciado en los últimos días en nuestro país nos demuestra que esto es así, la complicidad rampante con que operan mafias a lo interno de las instituciones del Estado llega a los límites del cine, tanto que reta a la creatividad y el entendimiento humano promedio. Tal es el caso de la Mafia en la importación y distribución del GLP que ha puesto de manifiesto hasta donde está corrompido y prostituido el Estado dominicano.

El tema de la mafia en la importación de GLP es digno de analizar a partir de la película el padrino o cualquier otra película de mafias y gánster de las mejores del cine mundial, esta mafia es el guion consensuado y dirigido por las mentes más perversas, hijas de la corrupción y la impunidad que carcomen la institucionalidad de nuestro país.

La resolución 07 legitima la mafia

La resolución en cuestión es el vivo ejemplo de la violación al principio fundamental de no legislar en beneficio propio o de relacionados, pero la ya famosa resolución 07 echó por tierra este principio cuando el Ministro de Industria y Comercio de entonces se prestó para uno de los robos más descarados del último siglo.

¿En qué consiste la resolución?

Esta resolución que como todas las demás comienza evocando leyes y decretos, con toda la formalidad necesaria para encubrir sus reales intenciones.

Esta resolución cuenta con un artículo y cuatro numerales en los que el ministro resuelve lo siguiente: modifica de manera gradual y escalonada el valor cargado al componente del flete dentro de la formula de paridad de importación (PIP), del gas licuado de petróleo (GLP), que había sido establecido en 135 dólares por tonelada métrica por la resolución 309bis, de fecha nueve de septiembre 2011, llevándolo esta vez hasta 205.50 dólares la tonelada métrica.

Lo más perverso de esta resolución no es solo el aumento sino también la forma en que se hace que evidencia una orquesta de voluntades perversas en perjuicio del pueblo dado que de una sola sentada este flamante ministro en 4 numerales aumenta en 170 dólares el flete de GLP para beneficiar en dos años con más de 20 mil millones de pesos a empresarios de los combustibles.

Este resoluta en el numeral i que el valor cargado al componente del flete dentro de la formula de paridad de importación (PIP), del gas licuado de petróleo (GLP), será de 185 dólares por

toneladas métricas a partir del sábado 12 de enero de 2013, pero sigue en el numeral II diciendo que para el sábado 6 de julio del mismo año este valor cargado seria entones de 205.50 dólares por toneladas métrica, ósea dos sábados en 6 meses los primeros 70 dólares.

Más adelante en la misma resolución en el numeral III el ministro dispone que para el sábado 4 de enero de 2014, otro sábado lleva este monto a 215.50 dólares y como forma de poner balanza o enmascarar la intención corrupta de lucrarse del dinero del pueblo en la misma resolución en su numeral IV dispone que otro sábado esta vez un año más tarde ósea sábado 03 de enero de 2015 este valor baje unos 10 dólares para situarlo en 205.50 dólares por tonelada métrica de GLP.

Cosa que más tarde seria modificado por la resolución 365bis, del mismo 2015 que elevo nuevamente este monto a 225.50 que es el precio actual y columna vertebral de la mafia del GLP que roba miles de millones de pesos a la población cada mes.

Esta resolución de manera especial constituye el cuerpo del delito toda vez que evidencia el afán del ministro por manipular el mercado en beneficio de terceros, una vez fijado el cargo de flete en la formula de precio de paridad de importación esto ha permitido manipular el mercado y estafar a los consumidores, dado que el precio a futuro del PIP incide directamente en el precio por galón del GLP. Estos aumentos expresados y aplicado a la cantidad de GLP por galón que se consume en el país cada año se transfieren en miles de millones de pesos estafados al pueblo.

Evidenciar a quienes conforman esta estructura mafiosa y sus cómplices en el Estado y gobierno, exigir que devuelvan lo robado y someterlos a la acción de la justicia seria lo menos que deberíamos esperar, pero entre mafias y mafiosos lo mas que se puede llegar es a algunos acuerdos de aposentos, y esos más de 5o mil millones de pesos que nos fueron seguirán descansando en las arcas de los señores oligarcas de las mafias dominicanas.

CONTINUARA…….