Algunos diseñadores de políticas públicas empiezan a considerar la posibilidad de que el país tenga que recurrir al Fondo Monetario Internacional (FMI) en busca de recursos, basado en un programa de ajuste, para enfrentar la situación que sobreviene como consecuencia de la crisis financiera global.
A este hecho se añade que hay dirigentes hoteleros que consideran la posibilidad de que, como ocurre en Europa, algunos hoteles puedan cerrar sus operaciones en la llamada temporada baja, sobre todo en el Norte.