Señor director:

Ese prestigioso diario en su edición de fecha 8 de julio en curso, publica el proyecto de reforma tributaria elaborado por el Partido de la Liberación Dominicana, en el cual se destaca un aumento a la tasa del ITBIS a un 16 por ciento y lo aplica a los intereses devengados por los depósitos colocados en las instituciones financieras.

También modifica el artículo 229 del Código Tributario, relativo a las exenciones generales, para exonerar del impuesto sobre la renta a los intereses percibidos por las personas físicas y jurídicas. Anteriormente estaban gravados los intereses percibidos por las personas jurídicas.

Esto se hace bajo el pretexto de equiparar a las personas físicas y jurídicas, pues todas pagarán el ITBIS por los intereses percibidos. Esto es totalmente injusto, ya que las personas jurídicas pueden deducir como gastos de su renta neta imponible los intereses pagados por los préstamos que le otorgan las entidades financieras, lo cual ha sido suprimido, desde la promulgación del Código Tributario, para las personas físicas, que no  pueden deducirla su renta neta imponible.

Un 16% sobre el monto de los intereses devengados podría ser una doble tributación, ya que los dineros depositados es un saldo de una remuneración que ya fue sujeta de impuestos. Además representa un porcentaje que reducirá la tasa efectiva pasiva que recibe de la institución financiera.

En efecto: RD$1,000,000.00 devengaría intereses calculados a un 20% anual la suma de RD$200,000.00, que gravados con un ITBIS de un 16% representaría RD$32,000.00, por lo cual los intereses de la suma depositada quedarían reducidos a una tasa 16.8%, pues estaría pagando un impuesto ascendente a un 3.2% del capital, lo cual podría resultar un impuesto confiscatoria que alejaría a los depositantes de las instituciones financieras.

Finalmente, debe tomar en cuenta que quienes mantienen sus ahorros en el país, corriendo todos los riesgos de la depreciación  monetaria y de la inflación, es en su gran mayoría la clase media, la cual estaría cargando con una parte importante de la reforma tributaria por este concepto, además de que todos los aumentos de los impuestos lo paga siempre el último consumidor.

Muy atentamente,