La primera renuncia de un funcionario del Gobierno de Luis Abinader se produjo ayer en el Ministerio de la Juventud, en la persona de su incumbente, Kimberly Taveras, quien hace dos meses se vio envuelta en un escándalo mediático, tras un reportaje en el que se cuestionó el patrimonio de RD$106 millones de pesos que ella presentó en su declaración jurada.

En una publicación realizada a la 1:42 de la tarde en su cuenta de Twitter, Taveras explica que la carta con su decisión de salir del cargo había sido entregada al primer mandatario de la República.

En la misiva de 4 párrafos explica que tenía 50 días apartada del cargo mediante una licencia que tomó para que las autoridades del Ministerio Público pudieran obrar con libertad en sus indagatorias, que asegura fueron tergiversadas por la serie de reportajes (de la periodista Nuria Piera), al momento de cuestionar sus actividades comerciales, “de cuando no era funcionaria pública” y que sembraron confusión en la sociedad.

La exfuncionaria indica que aún las pesquisas no han concluido, por lo que se ha visto seriamente afectada su vida familiar, política y profesional, pero además al Ministerio de la Juventud estar acéfalo, no puede seguir sometiendo la institución a ese tipo de incertidumbre administrativa.

“En aras de que mi búsqueda de justicia no perjudique la buena imagen de usted (Luis Abinader) y nuestro gobierno me aparto definitivamente del cargo de ministra de la Juventud”, expresa Taveras al final del tercer párrafo.
Expresa además que ahora se enfrenta al “sicariato moral” que busca que mujeres que salen de humildes comunidades puedan ser reconocidas, pero que lo hará con determinación y gallardía.

“Solo espero que esa justicia con efusividad investiga y persigue señalamientos públicos, tenga la valentía de reconocer a los inocentes”, destaca la exministra, que es investigada por la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción (Pepca) por tráfico de influencias (violar la Ley 340-06, de Compras y Contrataciones).