Enriquillo, Barahona.Los estudiantes de todo el país se preparan para iniciar las clases el próximo lunes. Sin embargo, los padres y madres de los alumnos de esta comunidad no se han apresurado a comprar los libros, uniformes y demás útiles escolares, y por el contrario, se aprestan decidir si desarrollarán una jornada de lucha.
Así, en las primeras horas de la mañana del lunes las aulas se convertirán en escenario de sendas asambleas entre los maestros del distrito y todos los sectores sociales que aseguran no aguantan más trabajar en medio de las lamentables condiciones de dos de sus principales centros educativos.
Se trata del Politécnico Guarocuya y de la escuela Ismael Miranda que tienen una matrícula de más de 1,200 estudiantes.
El primero no cuenta con las instalaciones eléctricas (red trifásica) necesarias para emplear los más de 25 equipos de Gastronomía, Turismo y Electrónica que les fueron donados por una institución española en el año 1998 y que están valorados en más de RD$8 millones de pesos.
Así, los salones de prácticas se constituyen en cementerios de hojalata que dejan mucho que desear para los niveles de formación del estudiantado.
Carlos Vidal, de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), recordó que en la institución se utilizaron los equipos por última vez en el año 1999 cuando se dañó el transformador que alimentaba al edificio. Más tarde, en 2002, pudieron reemplazarlos, pero que nunca fueron puestos por la falta del cableado interno.
A los problemas de este centro, que fue fundado en agosto del año 2001, se agrega que nunca ha recibido la subvención mensual que le corresponde por parte de la Secretaría de Educación. El director, Leonardo Ruiz, aseguró que por primera vez este año le fueron asignados RD$40 mil mensuales, que no ha recibido.
Si el sector oficial, en este caso la Dirección General de Educación Técnica de la Secretaría de Educación, no le da con que esto funcione, realmente, no va a funcionar nunca, afirmó.
En el caso de la escuela Ismael Miranda, que recibe a más de 700 alumnos convirtiéndose en la más grande de la comunidad, es que no cuenta con un plantel desde que el edificio en que funcionaba desde su fundación fuera demolido en febrero pasado.
Zoom
Mientras tanto
La decisión de iniciar el año escolar en la comunidad de Enriquillo, Barahona, implica que los padres con hijos en la Escuela Ismael Miranda acuerden de nuevo enviar a sus hijos a la capilla, restaurante y al club de la comunidad donde los muchachos terminaron el pasado año escolar. Los padres exigen que los trabajos inicien y nunca se detengan hasta la inauguración del nuevo edificio.