Ese es el problema: sí habrá crisis

Ese es el problema: sí habrá crisis

EDUARDO KLINGER PEVIDA
Si, inevitablemente va a haber crisis, a pesar de las afirmaciones y sapiencia del Sr. Bush, y entonces pobres de nosotros y de todos aquellos que ponen todos los huevos, o posturas, en la canasta norteamericana. Mi entrega anterior la titulé «Crisis or not Crisis: ese es el problema» partiendo de las afirmaciones del Presidente de que la economía estaba «bien» y señalaba el dilema que realmente encierra la economía para interpretar de manera acertada sus señales.

Sin embargo, no puede haber duda: se acerca una crisis y podemos afirmarlo tanto por los indicios que se aprecian como por el hecho ineludible de que la economía capitalista funciona por un ciclo.

Aunque algunos no quieran oír hablar de eso y ni siquiera que se les mencione el problema, por cerrar los ojos no van a dejar de sentir los embates.

A mediados de Agosto la FED   Reserva Federal o Banco Central norteamericano   hizo saber su parecer de manera clara: «Los mercados financieros se han deteriorado y el ajuste de las condiciones del crédito, así como el aumento de la incertidumbre, tienen la capacidad de desacelerar el crecimiento económico en el futuro.

«En estas circunstancias, y aun si la economía sigue creciendo a un ritmo moderado … juzga(mos) que los riesgos para el crecimiento han aumentado sensiblemente».

Aunque se acaba de anunciar que en el segundo trimestre la economía creció algo más del 3 %, el mismo estuvo por debajo de lo que previamente se había pronosticado. En verdad, la tendencia no es totalmente nueva. De un aceptable 3.6 % de crecimiento del PIB en el 2004, el mismo cayó a 3.1 % y 2.9 % en los años 2005 y 2006 respectivamente. Sin embargo, en el primer trimestre del 2007 cayó a un crecimiento de apenas el 0.6 %. No nos auto consolemos con el crecimiento del 3.4 % en el segundo trimestre. No cambia nada del panorama.

No importa tampoco, como se expresen algunos indicadores en el corto plazo y ni siquiera que el índice Dow Jones haya roto su récord a mediados de la pasada semana rebasando los 14 mil puntos. Esta resultando muy claro que el Dow Jones no esta reaccionando acorde con las señales del mercado y eso es tan peligroso como preocupante.

El comportamiento del empleo esta preocupando fuertemente a los inversionistas. En el mes de Julio la economía solo incrementó en 92 000 el numero de empleos, muy por debajo de la expectativa. El reporte de comienzos de Agosto situaba la tasa de desempleo en el 4.6 %, el mismo nivel del pasado año 2006. El viernes pasado, 5 de Octubre, habría de anunciarse el comportamiento del empleo en el mes de Septiembre y se esperaban noticias poco estimulantes. Lamentablemente para ese momento ya habré entregado este artículo a redacción.

Después de un período de crecimiento estable y una efervescencia del crédito hipotecario   aquel para comprar casas   que viendo la situación creada hoy muchos consideran que fue una «burbuja» de la economía, los consumidores dispararon sus demandas, disminuyendo el ahorro. Sin embargo, al llegar la restricción al crédito que se padece hoy, el colapso de la demanda hipotecaria y el temor por el futuro, inevitablemente, la reacción de los consumidores va a ser limitar el consumo y aumentar el ahorro para prepararse para lo que ellos y los analistas ven venir, aunque no lo vea el Presidente.

Alan Greenspan, considerado el gran guru contemporáneo del escenario económico norteamericano y quien fue durante casi veinte años Presidente de la FED, hasta que el Presidente lo sustituyó hace un poco mas de un año, al publicar recientemente sus memorias, señala que el Presidente Bush parece no entender el comportamiento de la economía y que ha cometido serios errores. Aunque el propio Greenspan se confiesa de filiación republicana, elogia a Clinton por el desempeño de la economía.

Debemos destacar que la prensa norteamericana, y la propia FED, ha estado destacando que el Presidente Bush es el único Presidente que no ha salido en defensa del dólar ante un proceso devaluatorio como el que sufre hoy la moneda norteamericana. Desde que en enero del 2001 asumió la Presidencia, el dólar se ha devaluado en un 13.2 %. En la época Clinton se apreció en un 18.3 %. Seguiremos.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas