El precandidato presidencial reformista Ricardo Espaillat consideró hoy que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) al proponer un “pacto mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular”, estaría violando un acuerdo anterior realizado en su asamblea general de 1966, y al que llamó “el pacto internacional de derechos civiles y políticos”.

“El acuerdo establecido del año 1996; parte 1, artículo 1, párrafo 1: establece que todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación, y en virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen su desarrollo económico, social y cultural», significó.

Agregó que «de esta forma, nuestros asuntos migratorios, incluyendo el otorgamiento de la nacionalidad dominicana y los requisitos para obtenerla, solo pueden emanar del propio Estado dominicano, y ningún otro estado, y ningún organismo internacional, pueden imponernos reglas o normas que no sean las establecidas por nuestro propio país” indicó el alto dirigente del PRSC.

El dirigente político hizo referencia al tratado “sobre nacionalidad” propuesto por el profesor inglés David Miller, y afirmó que “los estados son soberanos internamente en la medida en que son reconocidos como la autoridad ultima en las cuestiones que acaecen dentro de sus fronteras, y son soberanos externamente en la medida en que sus decisiones no pueden ser invalidadas por cualquier otro cuerpo, sea este un estado o una institución internacional”.

Así mismo, recordó al gobierno del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) que la República Dominicana es un Estado soberano como lo establece la Constitución en su artículo 1, y que la fuente de la soberanía reside exclusivamente en el pueblo, según el artículo 2 de la referida Carta Magna, y «que esa soberanía es inviolable, estableciendo principio de no intervención(articulo3)».

“En la situación tan delicada y crítica en que se encuentra nuestra patria, con una invasión constante de ilegales del vecino país de Haití, que amenaza cada vez más la identidad del pueblo y el carácter de la nación, el Gobierno no puede firmar ningún pacto que pueda poner en peligro nuestra soberanía sin antes realizar una consulta popular, añadió Espaillat.

Espaillat puntualizó que, si la pertenencia a alguna organización internacional pone en peligro el principio de soberanía, entonces «debíamos renunciar a la pertenencia de dicha organización. Por qué el interés fundamental de la nación, que es su existencia misma, está por encima de cualquier otro interés».