La Audiencia Nacional española aprobó ayer la extradición a Venezuela de Claudia Patricia Díaz Guillén, enfermera personal del fallecido presidente Hugo Chávez, reclamada por las autoridades de su país por presuntos delitos de blanqueo de capitales, asociación ilícita y malversación.
Díaz Guillen, arrestada en España el pasado 25 de abril, aparecía en la investigación de los papeles de Panamá por, supuestamente, haber recibido ayuda del bufete panameño Mossack Fonseca para “blindar” una fortuna no declarada, según informó el fiscal general de Venezuela, Tarek Saab, en Twitter. Contra esta decisión cabe recurso ante la propia Audiencia y, de mantenerse la extradición, la última palabra la tendrá el Gobierno español.
Díaz Guillén había alegado persecución política, pero la Justicia española cree que se trata de un argumento absolutamente genérico, que “no acredita, ni siquiera a modo de sospecha fundada”, que sea reclamada por tener ideas contrarias al gobierno o que haya un peligro concreto de que se vayan a anular sus derechos.