PARIS, Mayo 10 (AFP) – El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, subrayó el martes en París la necesidad de acelerar la ayuda prometida a Haití y garantizó que su país mantendrá las tropas desplegadas en virtud del mandato de la ONU.

«El compromiso del gobierno español es mantener sus tropas en Haití y participar en el proceso de pacificación y reconstrucción de aquel país», garantizó el canciller a la prensa, desmintiendo informaciones según las cuales España estaba dispuesta a retirarse si la ayuda humanitaria no llegaba.

No obstante, el ministro subrayó que España sí exige que la ayuda se acelere y con este fin, decidió junto a su homólogo francés Michel Barnier, enviar una carta conjunta a las instituciones europeas para pedirles el desembolso inmediato de la ayuda que corresponde al país antillano.

«Parece ser que sólo un 10% de la ayuda a la que la UE se comprometió ha llegado a Haití y precisamente, una de mis gestiones realizadas en París con Barnier fue elevar esta petición a Bruselas», informó Moratinos, subrayando la «responsabilidad» de la comunidad internacional en hacer llegar esta ayuda.

España es uno de los 20 países que participa, junto a un contingente marroquí, en la MINUSTAH, la fuerza de estabilización de la ONU en Haití, que a finales de febrero contaba con más de 7.413 uniformados, muchos de ellos latinoamericanos, apoyados por 359 civiles extranjeros y 800 locales.

La semana pasada en la sede de la ONU en Nueva York, el ministro español de Defensa, José Bono, anunció que Madrid retiraría antes de fin de año sus tropas destacadas en aquel país si la comunidad internacional no cumplía sus compromisos financieros.

Según Bono, sólo 300 de los 700 millones de dólares que debían destinarse a Haití han llegado al país.

En un seminario euromediterráneo dedicado esencialmente a seguridad y defensa y celebrado el martes en la capital francesa, Moratinos lanzó también la idea de una fuerza conjunta para defensa y seguridad en los países del Magreb.

«Les corresponde a ellos saber si es útil y oportuno, pero en el siglo XXI, los países del Magreb podrían tomar esta decisión que sería positiva para el sistema de seguridad colectivo», aseguró.

Este seminario coincidió con los 10 años de existencia del Proceso de Barcelona, de cooperación en la región euromediterránea, que se celebran en 2005.

«Diez años después, en los países existe una verdadera voluntad de cultivar el aspecto de seguridad y defensa de este Proceso, que en 1995 no se pudo desarrollar por que en Europa no había una política común al respecto», aseguró Moratinos, considerando que ante las nuevas amenazas, se imponen nuevas formas de cooperación y prevención.