Especialista advierte el ruido dejará sordas a generaciones

Especialista advierte el ruido dejará sordas a generaciones

La República Dominicana tendrá en los próximos años generaciones completas de sordos si no se controla el ruido excesivo y nocivo que afecta sobre todo a los más jóvenes. Los ruidos de la calle sobrepasan los 80 decibeles.
La advertencia la hizo ayer el doctor Freddy Ferreras Méndez, director de la escuela de Otorrinolaringología del hospital Salvador B. Gautier.
Una de las poblaciones de trabajadores más expuestas a enfermedades profesionales e infecciones, son los que laboran en los call center o centros de llamada empresariales. Esto se debe a la frecuencia con que usan audífonos y a los altos decibeles a que se exponen, dijo Ferreras Méndez.
El profesional aseguró que una parte importantísima de los jóvenes usa audífonos con un volumen superior a los 100 decibeles.
“Se va produciendo progresivamente una disminución de la audición, se escuchan ruidos sobre los 80 decibeles, cuando lo normal es entre 40 y 50”.
Ferreras Méndez dijo que las personas que trabajan en rampas de aeropuertos sin protección son candidatos a tener sordera, pues ahí se manejan hasta 120 decibeles y se exponen a daños agudos.
Insistió que en los call center, los que trabajan con audífonos tienen daño progresivo y es irreversible.
Indicó que en el país hay dos problemas graves en torno al tema, la no aplicación de las normas y la falta de conciencia.
Cuidado El otorrinolaringólogo dijo que los ruidos hacen daño en lo físico y lo emocional, y que existe un volumen dañino a todos los niveles que lo va alterando todo.
Los talleres metalmecánicos, las plantas generadoras de energía, las rampas de los aeropuertos, las imprentas, los vehículos, las perforadoras y retroexcavadoras, son altamente nocivas a la audición.
“Las discotecas, los colmadones y los motores con el muffler trabajado para que tengan un alto ruido, hacen daño a la salud auditiva”.
Se trata de un tema de control, pues existen leyes en Medio Ambiente, la Policía y hasta en el Código de Trabajo, pero no se cumple nada, dijo el experto a quien le preocupa el nivel de ruido al que se expone la población de las ciudades.

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