Hoy 
Por ERIC GILMORE
Del Contra Costa Times
SAN FRANCISCO. Era el domingo temprano, horas antes del partido de su equipo contra los Dodgers de Los Angeles y el dirigente de los Gigantes Felipe Alou empacaba su maleta para el próximo viaje.
Ahí fue cuando la pregunta entró a su cabeza. ¿Cuánto tiempo más quiere seguir dirigiendo? Realmente no lo sé, dijo Alou, de 71 años, antes de la derrota de los Gigantes. Estaba empacando para irme hoy. He estado empacando por mucho tiempo. Sé que habrá un momento en el que empaque por última vez. Adelante hasta el final de la temporada y verá una lista interminable de preguntas que rodean a los Gigantes. El futuro de Alou sigue indeciso.
Al igual que el futuro de Barry Bonds, cuya glacial persecución de Babe Ruth en la lista de jonrones de todos los tiempos siguió con otro día sin jonrones o hits.
Bonds es uno de nueve veteranos en su último año de contrato junto con Jason Schmidt, Moisés Alou, Ray Durham, Pedro Féliz, Steve Kline, Todd Greene, José Vizcaíno y Jamey Wright.
Ellos representan más de US$50 millones de la nómina de US$90 millones de los Gigantes, de los que US$18 millones van para Bonds y US$10.5 millones para Schmidt.
Incluyan a Steve Finley que tiene una opción para el 2007 hablamos de 10 Gigantes y más de US$57 millones.
Estamos viendo la era de Bonds con los Gigantes finalizar ante nuestros ojos, día a día, frecuentemente, derrota a derrota.
No podemos evitar sino creer que este equipo debe y será explotado después de la temporada y luego reconstruir, principalmente por agentes libres atraídos a San Francisco con una pila de dinero. El gerente general de los Gigantes Brian Sabean ha construido un equipo alrededor de Bonds, recogiendo veteranos que se apagan para apoyar a su superestrella. Los días de estrellato de Bonds, sin embargo, parecen terminados y Sabean necesita un nuevo plan.
El debe tener suficiente efectivo para atraer peloteros que no estén cerca de 40 años. La última vez que me fijé, no hay regla que lo prohiba.
Versión (Dionisio Soldevila Brea).
