Hoy 
POR LEONORA RAMÍREZ S.
Franklyn Almeyda consideró ayer que el Bloque Progresista podría conseguir en las elecciones del martes 23 senadores y una mayoría absoluta en la Cámara de Diputados. Al referirse a los puestos municipales, dijo que esos son más difíciles de cuantificar, pero resaltó que su partido tiene una proyección que prefiere no mencionar.
El Bloque Progresista lo componen el PLD, Bloque Institucional Socialdemócrata (BIS), Alianza por la Democracia (APD), Unión Demócrata Cristiana (UDC), Fuerza Nacional Progresista (FNP), Partido de los Trabajadores Dominicanos (PTD), Partido Liberal de la República Dominicana y el Consejo Presidencial del Partido Reformista Social Cristiano.
Almeyda, quien es secretario de Interior y Policía, consideró además que en el PLD hay mucha seguridad de que el actual proceso electoral saldrá muy bien, porque se logró un control sobre el padrón electoral, el sistema de informática de la Junta Central Electoral (JCE), y porque se creó la Comisión de Asistencia Electoral.
«Tenemos la seguridad de que el proceso se haga limpio, y en parte se debe a los esfuerzos que hacemos como organización política, por la vigilancia nacional e internacional, y por la gente seria que tiene el organismos comicial, en las cuales confiamos», expresó en el almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio.
EL PROBLEMA DE LOS DISLOCADOS
Danilo Díaz, secretario de asuntos electorales del PLD, dijo que el traslado de votantes a colegios electorales sólo se puede lograr con la complicidad de funcionarios de las direcciones de Cedulación y de Registro.
Uno de los temas más conflictivos de estos comicios congresionales y municipales es el relacionado con el cambio de lugar de votación de más de 170,000 personas, de las cuales 102,000 casos contaron con la autorización de las mismas.
Esas modificaciones se produjeron en el período 2004-2006, y en ese sentido Díaz explicó que quien las autorizó fue el juez Salvador Ramos.
«El creó facilidades para hacer los cambios, que se produjeron durante el proceso de convención del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), para que los miembros de ese partido se pudieran trasladar al lugar de representación de los candidatos».
Al poner como ejemplo el caso de Pedernales, donde esas irregularidades permitieron un crecimiento inusual de un 20% de los electores, dijo que ese tipo de vicios es una puñalada a la democracia.
«Eso tenía un impacto en lo que se refiere a la voluntad de esa comunidad de escoger sus autoridades municipales y congresionales», expresó.
