Santiago. -Los comerciantes del mercado fronterizo de este municipio, dijeron ayer que están esperanzados en que tras la reciente designación del primer ministro de Haití y la construcción de la segunda etapa de mercado en el lado haitiano, las ventas incrementen y el movimiento económico sea más fluído, para así superar los inconvenientes suscitados el año pasado, que dejó pérdidas millonarias a los mercaderes.
Abigaíl Bueno, presidente de la Asociación de Comerciantes Detallistas, pidió además a las autoridades dominicanas aumentar sus esfuerzos para encontrar una salida a la prohibición de ingreso por tierra a Haití de productos nativos impuestas el año pasado, que aún continúan vigentes.
“El año 2016 pasamos por muchos inconvenientes. Una prohibición de 23 productos más el incendio que hubo aquí en el mercado, donde más de 40 comerciantes perdieron sus locales y mercancías. La recuperación ha sido lenta, mientras que las pérdidas han sido cuantiosas. Pero estamos esperanzados en que el nuevo Gobierno de Haití se interese más por establecer una línea comercial con la República Dominicana”, expresó Bueno.
El comerciante dijo que otro de los factores negativos que incide en el comercio fronterizo es la devaluación de la moneda haitiana, que actualmente se cotiza a casi 60 gourdes por dólar. Según explicó Bueno, la devaluación de la moneda haitiana debe ser un tema de los principales en la agenda del nuevo Gobierno de ese país.
“Nosotros tenemos la esperanza de que el Gobierno haitiano se vaya organizando, para que así también se organice el comercio entre las dos naciones. Necesitamos que las operaciones sean muy activas, como en años anteriores”, sostuvo el dirigente de comerciantes.
Una cuestión que podría ayudar a movilizar el comercio en el mercado fronterizo es la ampliación de sus instalaciones, especialmente, porque ya se construye la segunda etapa del mercado, cuyos fondos, igual que la primera, serán destinados en su mayoría por la Unión Europea.
Ayer se observó a decenas de obreros trabajando en lo que serán las instalaciones de la segunda etapa, ubicadas en territorio haitiano, para la cual ya se construyó un puente.