Esperan del gobierno salida a los apagones

Esperan del gobierno salida a los apagones

Ayer, los directivos del Conep se reunieron con Radhamés Segura. Hoy entregarán una solución a la crisis, desde la perspectiva empresarial

Desde las amas de casa hasta los pequeños, medianos y grandes empresarios claman por una solución a la severa crisis eléctrica que castiga a los dominicanos. Pero el gobierno no parece claro en lo que hay que hacer. Las generadoras esperan el pago de cientos de millones de dólares atrasados, pero las autoridades no terminan de entregar los fondos. Parece que no tienen. Mientras, el empresario Celso Marranzini dice que la solución es fácil: despolitizar el sistema y buscar gerentes de verdad.

Pequeños y medianos comerciantes,  amas de casa y organizaciones barriales lanzan el grito al cielo porque apenas reciben entre tres y cuatro horas de energía eléctrica, mientras las facturas llegan sin falta, se dañan los productos, como embutidos, carnes y otros por falta de refrigeración.

Dueños de medianos supermercados y otros negocios, advirtieron sobre la quiebra de sus establecimientos, en caso de que no se  produzca una solución urgente  al problema de los apagones, ya que sus establecimientos no aguantan seguir operando con plantas de emergencia.

 En barrios y sectores del Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo, los usuarios denunciaron que los apagones son de tal magnitud que ni siquiera los inversores funcionan, porque las pocas horas de suministro no da para recargar las baterías.

Ramón Pérez, propietario del centro comercial Liverpool, en San Felipe de Villa Mella, en Santo Domingo Norte, así como sus hijos José y Julián Pérez, señalaron que los costos se han disparado en el negocio, haciendo imposible seguir funcionando.

Expusieron que aunque no reciben el servicio energético, las facturas llegan sin problema, alcanzando hasta  106 mil pesos mensuales, sin embargo, gastan una cantidad similar en la compra de gasoil para mantener las plantas de emergencia, porque de lo contrario tendría que cerrar sus puertas.

Señalaron que cuentan con dos plantas, que utilizan de día y en la noche, para evitar que las carnes, embutidos y productos que se ameritan refrigeración se dañen.

En cambio, Feliz Faustino Rodríguez, encargado del supermercado Soberano, en Sabana Perdida, informó que el suministro de energía eléctrica es prácticamente inexistente en la zona, provocando graves daños a los pequeños y medianos comerciantes.

Sostuvo que están gastando en combustible alrededor de 150 mil pesos todos los meses, una cantidad similar al monto de la factura.

Pero también pegaron el grito al cielo ayer los propietarios de peluquerías y salones de belleza, quienes han tenido que acudir alñ uso de  plantas de emergencia para  servir a medias a sus clientes.

Esta es la situación de la peluquería Estilo y Elegancia, en la avenida San Vicente de Paúl, en Santo Domingo Este, donde su administradora, Heidi Valdez, dijo que ni siquiera está cubriendo los costos.

Otros negocios al borde de la desaparición son las tapicerías.

Ayer los trabajadores de estos negocios no encontraban qué hacer en los barrios de Villa Consuelo, San Carlos y Villa Juana, pues las interrupciones del servicio de   energía eléctrica los mantenía paralizados.

Antecedentes

La solución

El 13 de octubre pasado,  el vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Radhamés Segura, admitió  que la deuda con los generadores ascendía a US$364.9 millones, producto del alza de los precios del petróleo, e informó que antes del 25 de ese mes se pagarían US$100 millones.

La verdad

El funcionario sostuvo que   la merma en el suministro energético era producto de una combinación de salida de servicio de las plantas generadoras por razones técnicas y otras por falta de combustibles.

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