Vigilancia extrema. “El suscrito tiene servicio de vigilancia para ver la salida y entrada a la casa pero hasta la fecha no nos hemos dado cuenta lo tratado en las reuniones”, dice uno de los informes sobre Bosch.
“El profesor Juan Bosch sostuvo una reunión en su escondite con algunos maestros y les dijo: profesores, esta es la hora buena para lanzarse a la huelga, los dominicanos no soportan el costo de la vida y estoy seguro de que en esta oportunidad el doctor Balaguer explotará como una vejiga”.
El supuesto encuentro aparece descrito por Rafael Bello Andino, subsecretario administrativo de la Presidencia, en el memorándum número 11371 del 1 de mayo de 1973 remitido al secretario de Estado de Educación, Bellas Artes y Cultos.
Agrega que Bosch diría que a esa huelga “se unirán los comerciantes, mayoristas y detallistas, los choferes de Unachosin, los profesionales y todo el pueblo”.
Bello Andino apuntaba que el informe fue recibido por la Presidencia de la República. En realidad, quien lo envió fue el primer teniente Basilio Francisco Méndez Pérez, Oficial de Inteligencia, quien originalmente lo dirigió al G-2 el 25 de abril de 1973. R. Emilio Jiménez hijo, secretario de las Fuerzas Armadas, lo remitió a Balaguer el 27, un día después de que se lo enviara Enrique Pérez y Pérez, jefe de Estado Mayor del Ejército Nacional quien lo recibió del teniente coronel José Indalecio Peral Brea, Auxiliar de Estado Mayor del G-2.
El 25 de junio se informaba al jefe del ejército que el 21 Juan Bosch participó en una reunión en la calle César Nicolás Penson en la que se encontraban Elio Brea, médico; Julio Aníbal Suárez, presidente de la Asociación Dominicana de Abogados (Adoma); Julio Francisco Santamaría, secretario del Frente Universitario Socialista Democrático (FUSD), y el infiltrado, quien según el informante era un comandante del Cuarto Batallón “Juan Sánchez Ramírez”, que tenía el cargo en el PRD de encargado del comité de “vigilancia secreta”.
Reportó que Adoma se mantendría alerta “para apoyar las grandes movilizaciones que se llevarían a cabo en protesta “por la reelección de Balaguer”. .
Visitas de Bosch El 17 de febrero de 1971, Rafael A. Valdez Hilario, jefe de Estado Mayor del Ejército Nacional, declaraba al secretario de las Fuerzas Armadas que según comunicó a su despacho el comandante del destacamento de San José de Ocoa, a las 11 de la mañana del día 13 visitó aquella localidad el profesor Juan Bosch “con el propósito de reorganizar los comités de su partido”. Añade que Bosch “fue seguido por más o menos 200 personas” y que durante su estadía no se alteró el orden público.
Abraham Méndez Lara, secretario de las Fuerzas Armadas, informó a Balaguer la visita anexándole el memorándum número 3887 de Valdez Hilario.
Neit Rafael Nivar Seijas, jefe de la Policía Nacional, escribió a Balaguer el “Memorándum Confidencial” número 08458 del seis de abril de 1972 informándole: “Esta noche el profesor Juan Bosch estará en el Sindicato Nacional de Periodistas Profesionales” (SNPP) para reunirse con los comunicadores “que presenciaron la intervención de la Policía Nacional en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD)”. Explicaba que el local estaba ubicado en el Centro de Los Héroes, detrás de la iglesia, cerca de donde se encuentran las oficinas de la Tabacalera, y que tenía un letrero que decía SNP (sic).
Hay reportes desde San Pedro de Macorís informando de visitas de Bosch “a una residencia veraniega propiedad del señor Oscar Hazim”, en Los Guayacanes. Una fue el 20 de agosto de 1972 y el líder del PRD ocupaba un carro azul placa número 108-769.
Domingo Antonio Martínez Frías, encargado de la sección Servicio Secreto de la Policía Nacional, informó que Bosch “fue vigilado a una distancia prudente” por el sargento mayor José María Sánchez Cisneros, de Investigaciones Criminales, y por el raso Enrique Cuevas de la Paz. Nivar Seijas le remitió el informe a Balaguer el 28 anexándole el oficio número 231 del comandante del departamento sureste de la Policía.
Otra visita de Bosch a Hazim se habría producido el 1 de abril de 1972, a las 5:30 de la tarde, según informó el Jefe de Estado Mayor del Ejército Nacional, Rafael de Jesús Checo. Dijo que Bosch se retiró a las 5:40.
Hubo una tercera, según memorándum firmado por Checo. Bosch supuestamente llegó a las 8:00 AM pero salió a las 8:30 con destino a Santo Domingo, “en razón a que dicha casa se encontraba cerrada”.
El seis de noviembre de 1971, a través del memorándum número 56, el segundo teniente Rafael Antonio Arias Álvarez, oficial de Inteligencia de la fortaleza “Concepción”, informaba que en la víspera Bosch estuvo en esa ciudad en los carros placas números 35505 y 27913 acompañado “de los nombrados Ares Maldonado y Washington de Peña” para la inauguración de un teatro “propiedad de un grupo de hacendados, ingenieros y médicos” y que cuando Bosch hizo su entrada “fue recibido por el público con aplausos”.
Informan los sitios donde estuvo Bosch después de la ceremonia. Arias declara que “no se registró nada anormal” y que el visitante abandonó la ciudad “a eso de las 5:30 PM”. El teniente coronel abogado Narciso Elio Bautista, del G-2, lo remitió a los jefes militares y ellos a Balaguer.
Un informe del primer teniente Basilio Francisco Méndez Pérez denuncia otra reunión de Bosch en la casa de Braulio Mateo, en Guayacanes, próximo a la playa de Juan Dolio. Agrega que al expresidente siempre lo acompañaban a esa vivienda cuatro carros en uno de los cuales viajaba con Hugo Tolentino Dipp y Porfirio Montes de Oca.
“Esa casa la tiene alquilada con todos sus ajuares el señor Porfirio Montes de Oca hijo (Firo), solamente la usa Juan Bosch y sus camaradas para hacer reuniones. La misma es cuidada por un señor al que apodan Chacho y cuando están en sus reuniones ponen dos hombres de servicio, uno al frente y otro en el fondo de la casa…”.
“El suscrito tiene servicio de vigilancia para ver la salida y entrada a la casa pero hasta la fecha no nos hemos dado cuenta lo tratado en las reuniones” expresa Méndez Pérez quien escribía al G-2, al teniente coronel José Indalecio Peral Brea, a Julio Antonio Soto Echavarría, Jefe de Estado Mayor, interino, del Ejército Nacional y a R. Emilio Jiménez hijo quien lo reportó a Balaguer.
En los documentos aparece Carmen Quidiello de Bosch, no por espionaje sino debido a una intimación de inmueble y mobiliario contra el Estado Dominicano del siete de junio de 1973. Fabio Fiallo Cáceres, Procurador General de la República, la envió a J. Ricardo Ricourt. El abogado de la señora de Bosch era Julio Ibarra Ríos. Quidiello intimaba a reponerle “las puertas, closet, cerraduras, llavines y parte del mobiliario que les fueron destruidos por la policía “que irrumpió violentamente” en su apartamento de la César Nicolás Penson número 60.
Los agentes permanecieron “varias horas en posesión de la residencia a la que impedían entrar y salir”, lo cual constituía “algo insólito e incalificable por residir en ella el profesor Juan Bosch, expresidente de la República”.