El pasado lunes, el señor Marino Antonio Moreta perdió la vida de manera trágica a manos de tres delincuentes quienes penetraron a su vivienda en Boca Chica.

Su esposa, devastada por el dolor, lamentó la muerte de lo que fue en vida un hombre bueno y padre ejemplar. “Él era un hombre bueno, un padre de familia que nunca se rindió, nunca me dejó, nunca me maltrató… Un padre ejemplar, como el no hay otro, me lo quitó la delincuencia”, clamó la mujer con la voz quebrantada.

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Según relató la dama, los desaprensivos efectuaron el acto frente a sus ojos, impidiéndole socorrer a su marido. “Lo mataron delante de mi  yo no pude hacer nada, me iban a dejar a mis hijos sin padre y sin madre, me iban a matar a mí también”, añadió con pesar.

«Dale arrepentimiento Señor, no les tengo rencor«

Sin embargo, más allá del sufrimiento, su mensaje es de perdón, pues ruega a Dios sembrar arrepentimiento en el corazón de los responsables de este hecho atroz que ha dejado su familia incompleta, alegando que ella por su parte no les guarda rencor.

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