El abogado Enmanuel Esquea Guerrero consideró ayer que el proyecto de reforma constitucional sometido por el Poder Ejecutivo es eminentemente retrógrado.
Cree que el proyecto es un natimuerto y tiene un nacimiento espúreo.
Al ser entrevistado en el programa Líderes, Esquea Guerrero dijo que el presidente Leonel Fernández pretende que la nueva Constitución dure más que la de Joaquín Balaguer, que permaneció vigente 22 años.
Precisó que para modificarla exige las dos terceras partes de la matrícula de los legisladores.
Cree que ese mecanismo de reforma hará prácticamente imposible lograr que la nueva Carta Magna se modifique algún día.
Expresó que el proyecto está concebido para que Fernández pueda aspirar en los comicios del 2012, 2016 y 2020.
Resaltó que la creación de un tribunal contencioso electoral es un paso positivo, pero criticó el hecho de que el proyecto pretenda ser un traje a la medida del presidente Fernández para perpetuarse en el poder.
El dirigente perredeísta lamentó que el proyecto le quite atribuciones al Poder Legislativo.
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Poder Suprema
1. Esquea dijo que el proyecto busca eliminar la facultad que tiene la Suprema Corte de Justicia de conocer o no la constitucionalidad de los actos de gobierno y las leyes.
2. Precisó que la creación de una Sala Constitucional es un atentado a la trilogía de poderes que consagra la Constitución actual.
3. Cree con el proyecto se le da un golpe de Estado al Poder Judicial, pues crea tres poderes judiciales, como Sala Constitucional y Tribunal Contencioso Administrativo.